Mientras que las versiones de actual generación de Assassin’s Creed IV: Black Flag ya están en la calle desde hace varios días, las de PC y nueva generación esperan su momento para llegar a las estanterías y ser comparadas a nivel técnico. De momento, todo augura que encontraremos pocas diferencias entre ambas, lo cual ha provocado importantes problemas de insomnio en Ubisoft.
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Así lo han declarado sus propios responsables al hablar de las versiones next-gen, aseguran que haber conseguido meter todo Black Flag en unas máquinas tan veteranas se ha saldado con importantes dolores de cabeza y mucha Dormidina:
El desarrollo de ambas fue muy sencillo ya que las 2 son muy similares a los PC. La actual generación fue muy difícil e incluso una pesadilla. Tanto Xbox One como PS4 eran fáciles de llevar con sus compañías, que estaban allí para ayudarnos.
Lo más complicado fue entender tanto los requisitos de Microsoft y SONY para las consolas. Ellos estaban tratando de descifrarlas para sí mismos.
Ojala la falta de sueño les obligue a tirarse unos cuantos meses de descanso y la agotada franquicia Assassin’s Creed se tome un merecido respiro, falta le hace.
Vía: IGN