Más de 100 millones de móviles han sido infectados con el malware Dark Herring. Google ha tomado cartas en el asunto, aunque el virus ha robado millones de dólares a los usuarios.
Google ha intentado poner freno a uno de los mayores malware de toda la historia en Android. Una estafa en toda regla bautizada como Dark Herring. El virus se oculta en cientos de apps de la Play Store y ha logrado infectar a 105 millones de dispositivos en todo el mundo.
El funcionamiento de la estafa no preocupaba a las víctimas en primera instancia. Dark Herring se hacía pasar por una aplicación legítima. Su funcionamiento era el esperado y no levantaba sospechas. Sin embargo, las apps cobraban a escondidas hasta 15 dólares al mes por un servicio premium.
Llegados a este punto, os preguntaréis cómo los usuarios no se daban cuenta de la estafa. La respuesta es sencilla: el cargo se pasaba a través de la factura telefónica. El usuario podía tardar, en el mejor de lo casos, semanas en enterarse. Luego tendría que iniciar los trámites pertinentes para la devolución del importe con el operador y demostrar que no se había suscrito al servicio.
En total han identificado 470 apps implicadas en la estafa. Todas ellas funcionales. Había tanto videojuegos como aplicaciones de productividad o entretenimiento —traductores, editores de fotografías o programas para streamear, entre otros—. El ataque comenzó en marzo de 2020, junto a la pandemia. Google ha eliminado todas ellas de la Play Store. Solo ha necesitado casi dos años para hacerlo.
El peligro no ha finalizado
No obstante, el peligro no ha finalizado. Las apps de Dark Herring no están en la tienda oficial, pero se pueden seguir encontrando en la de terceros y no se eliminan automáticamente de los teléfonos que las tuvieran instaladas.
Para saber si estás en peligro puedes acudir a la sección ‘Pagos y suscripciones’ dentro de la la tienda digital Google Play Store en tu teléfono Android. Dentro podrás ver todas tus suscripciones. Si ves una sospechosa, cancélala y procede a eliminar la app del dispositivo.
Fuente: Zimperium.