Desde la compañía aseguran estar teniendo problemas con el organismo y la relación -que lleva más de 30 años activa- podría terminar.
EA lleva explotando la licencia FIFA nada más y nada menos que 30 años. Tres décadas, seis lustros. Se dice pronto, pero hay que echar la vista a 1993 para ver el primer juego con esta nomenclatura. Las últimas noticias nos animan a pensar que la relación está en la cuerda floja. Desde la compañía de videojuegos aseguran que el único valor que han obtenido de la licencia en un año en el que no hay Mundial son «cuatro letras en una caja«.
Así lo aseveró el CEO de EA, Andrew Wilson, en una reunión interna que tuvo lugar en noviembre y que ahora ha recogido VGC. El ejecutivo aseguraba que la licencia FIFA estaba suponiendo «un impedimento» para la ambición de la compañía.
Además, fuentes internas consultadas por el portal web aseguraban que FIFA habría impedido a EA «mearse fuera del tiesto» y salirse del encorsetado formato de 11vs11 típico del fútbol. Algunos integrantes de la desarrolladora habrían clamado por «entornos digitales más amplios«, rechazando así la rígida política de la FIFA.
Cuestionados acerca de estas declaraciones, desde EA no han querido afirmar nada.
Según apuntaba New York Times, las negociaciones estaban paradas: EA deseaba tener más derechos, y FIFA clamaba el doble de dinero para renovar la licencia. En total, 2,5 billones de dólares (unos 2.500 millones de euros). Una auténtica salvajada. En la actualidad, el contrato es de unos 600 millones de dólares.
No se sabe hacia dónde tirará esto. Las negociaciones entre ambos órganos parecen no llegar a buen puerto y, si todo sigue como está ahora, FIFA 23 podría ser el último de la saga en llamarse así -coincide con el año del Mundial de fútbol-. Veremos a ver qué depara el futuro. De momento, nos quedamos con el actual.