Batman se retira forzosamente y deja paso a cuatro héroes que nada tienen que envidiarle. Dentro análisis de Gotham Knights.
Si algo define una gran saga de cómics no es su protagonista, sino todo lo que le rodea para llegar a ser un gran protagonista. Uno de los mejores ejemplos que podemos echarnos a la chepa es Batman, cuya ciudad de Gotham repleta de oscuridad, villanos memorables e infinidad de secretos hace que el caballero oscuro brille como si no hubiese un mañana sobresaliendo por encima de otros héroes de DC. Pero esto también es gracias a sus aliados, la batfamilia, una cada vez más grande y que los chicos de WBG Montreal han decido reunir para dar vida a su nuevo juego. En este análisis de Gotham Knights veremos qué tal lo hacen sin estar la sombra de Batman para cuidarles.
Batman no está y se lía parda en Gotham
Ha pasado lo impensable: Batman, el legendario caballero protector de Gotham, ha muerto. La noticia corre como la pólvora y los criminales empiezan a frotarse las manos. Las bandas, antaño cohibidas por el miedo infundido por el caballero oscuro, se envalentonan y vuelven a sumir en el caos a la ciudad gótica. Pero no todo está perdido, pues los «sidekicks» de Batman han absorbido el rol de su mentor para continuar con su labor. Ellos son Jason Todd (Red Hood), Dick Grayson (Nightwing), Barbara Gordon (Batgirl) y Tim Drake (Robin).
Con esta premisa tan interesante se abre Gotham Knights, trasladando y evolucionando la famosa fórmula de los Batman Arkham para traernos una aventura cooperativa de lo más atractiva. Claro está, tenemos que tener en cuenta que los padres originales de la fórmula, Rocksteady, no están detrás de este proyecto, sino que son los chicos de Warner Bros. Games Montreal, artífices de Batman Arkham Origins, quienes dieron vida a este experimento.
Uno que nos deja toda la ciudad de Gotham para ser recorrida con nuestro libre albedrio, cogiendo aquellas mecánicas que mejor funcionaban de los juegos predecesores y fijándose en nuevos contendientes, como Marvel’s Spider-Man, para sacar la mejor versión posible de sus ideas. Así de partida puedo deciros que Gotham Knights consigue lo que se propone, pero con muchos matices.
Investiga, da palizas y mejórate para proteger la ciudad
La fórmula de Gotham Knights está muy clara: piérdete por las calles de Gotham solucionando delitos que estén en curso para adquirir experiencia, artículos de mejora y nuevo equipamiento. Esto es una constante que iremos desarrollando durante toda la partida, pues la gracia de sobrevolar Gotham con nuestro gancho – y diferentes gadgets – nos picará para meter las narices en asuntos criminales ajenos de forma recurrente. Tal es así, que cuando nos demos cuenta, nuestro nivel y eficacia del equipo irá en consonancia con los requisitos que nos demanda la historia, solventándose la ardua tarea de tener que farmear por obligación.
En este sentido, está un escalón por encima de juegos que siguen este patrón como Assassin’s Creed Valhalla o The Witcher 3, cuyas zonas se delimitaban por el nivel de los enemigos y nos obligaban a postergar la historia a favor de mejorar nuestro personaje desarrollando contenidos secundarios. No obstante, no es oro todo lo que reluce, pues Gotham Knights absorbe los sistemas de clases para su equipo, teniendo que pasar más tiempo del que me gustaría clasificando qué pieza era mejor que otra por sus características y colores. La verdad es que no entiendo esta moda de meter rarezas a todo, y es que tengo que decir que además en este juego no pega ni con cola.
No así su personalización, pues es el juego de Batman donde más podremos dar rienda suelta a nuestra imaginación para llevar sets coloridos a nuestro gusto. Podemos cambiar las máscaras, guantes, botas y hasta el símbolo de nuestro héroe. Incluso aplicar skins por encima de lo que llevemos puesto con trajes reconocibles de los cómics y otros especiales tributando a ciertos momentos o eventos del videojuego. Algo que también se traslada a nuestra bat-moto, la cual podremos cambiar de color y de forma para diferenciarnos de nuestros compañeros.
Se acabó el «Simon dice», ahora pegamos con propiedad
Uno de los puntos más atractivos de Gotham Knights reside en su forma de hacer combates. Si esperabais que continuase con la fórmula de los Batman Arkham, siendo desilusionaros, porque lo vivido aquí me ha recordado más a Marvel’s Spider-Man, y aún así se siente más libre que este, pues no estamos obligados a responder a contraataques, sino que la base es la de un beat em up o hack and slash más tradicional. Dicho de otra forma, podemos pegar libremente al objetivo que queramos, cambiar entre ellos a placer y dirigir nuestra atención con la cámara como un juego de acción de toda la vida.
Puede que se sienta algo vacuo en un inicio, pero conforme vayamos subiendo de nivel a nuestro héroe y consigamos más habilidades especiales, veremos que podemos hacer auténticas virguerías. Además, cada uno de los héroes es diferente del anterior en este sentido, siendo cada uno más especialista en una forma de combate. Por ejemplo, a Red Hodd se le da mejor el combate a distancia, pudiendo solventar la mayoría de batallas a base de darle al gatillo como si de un third person shooter se tratase. Nightwing se apoya más en su agilidad para esquivar golpes, hacer contraataques y sorprender a sus víctimas desde el aire. Robin va con todo contra grupos grandes de enemigos pudiendo barrer grandes distancias horizontales con su bastón. Por último, Batgirl prefiere el uno contra uno y confiar en sus gadgets. En nuestra mano queda escoger el que más nos guste o el que mejor case con nuestra forma de jugar.
De todas formas, el juego no nos limita a encasillarnos con uno si no queremos. Desde nuestra base (El Campanario) podemos cambiar entre ellos cuando queramos además de realizar otras actividades como fabricar nuevas piezas de equipo, investigar pistas sobre diferentes casos o entrenar nuevas técnicas de combate.
Una familia no la une la sangre, la une las experiencias vividas
Otra cosa que me ha gustado mucho ha sido cómo han llevado la relación entre los personajes. Gotham Knights no es todo centrarse en limpiar la ciudad a base de puñetazos, sino que deja tiempo para que nuestros protagonistas estrechen lazos en El Campanario. Aquí, junto a Alfred, seremos testigos de la personalidad de cada uno haciendo tareas cotidianas como la comida, practicar ejercicio o incluso jugando a videojuegos. Esto es algo donde seremos actores pasivos, es decir, que lo disfrutaremos mediante conversaciones que se mantienen en segundo plano o cinemáticas que se activan de formas muy concretas.
Se nota que en WBG Monteral hay mucho cariño por el universo de Batman y sus personajes. Solo hay que ver la decoración de El Campanario y entender que incluso a través de una foto, póster o figurita de adorno se nos cuentan historias pasadas que hemos podido vivir en otros formatos del caballero oscuro. El tributo es constante y la atmósfera que se respira puede trasladarnos perfectamente a las viñetas de cualquier cómic de DC que protagonice uno de nuestros cuatro héroes.
Esto es algo que también veremos reflejados en los villanos. Gotham Knights no es un recuentro tan concurrido como lo fueron los anteriores Batman Arkham, sino que prefiere centrarse en una trama más concreta y dejarnos algún malhechor por ahí perdido en forma de actividad secundaria. En concreto, tendremos que lidiar con Harely Quinn, Clayface y Freeze, situándose la trama principal en una conspiración perpetuada por El Tribunal de los Búhos y La Liga de las Sombras. No os contaré más, pues la historia en sí sabe desarrollarse muy bien, dejándonos momentazos y sabiendo tejer el misterio de tal forma que sintamos la necesidad de seguir tirando del hilo.
Cuatro héroes, una misma misión. Alíate con quién más te guste
Aunque Gotham Knights se puede disfrutar de inicio a fin jugando solo, su potencial reside en su vertiente cooperativa. Con ella activa, podremos invitar o unirnos a la partida de otro jugador, pudiendo realizar cualquier misión o evento del videojuego sin limitaciones. ¿Queréis ir juntos a partir caras solventando delitos en curso? Adelante. ¿Prefieres que cada uno vaya por su cuenta para ir haciendo más misiones a la vez? También puedes. En ese sentido el juego funciona de maravilla, haciéndote sentir que realmente estás en un mundo vivo que reacciona al paso de todos los jugadores que estén en partida y no solo ante la actividad del anfitrión.
De esto se benefician también los combates, pues algunas habilidades que podemos aprender de los cuatro héroes son más útiles cuando jugamos en compañía. Esto nos permite incluso profesionalizarnos para desarrollar determinados roles. Por ejemplo, si nuestra idea es jugar el juego entero con un amigo, podemos escoger aprender habilidades que curan o «buffan» al compañero, siendo así un jugador support. Algo perfectamente combinable con aptitudes pasivas que pueden tener las piezas de equipo más valiosas, por lo que las posibilidades son infinitas. También aviso que lo ideal es hacerte un personaje polivalente, pero que la opción está ahí igualmente.
Otra función donde se nota que el juego está hecho pensando en el cooperativo es en el Modo Foto. El hecho de que tenga tantas opciones me ha alegrado el corazoncito, pues podemos sacar auténticas instantáneas de infarto a poco que echemos nuestro tiempo aprendiendo a usarlo. Cuanto más en cooperativo, pues hay que sumarle los gestos que podemos hacer entre varios personajes, pudiendo así realizar fotografías muy divertidas. A buen seguro que veremos muchos memes y trabajos muy currados salidos de esta modalidad en redes sociales en cuanto el juego se estrene.
Análisis de Gotham Knights – De justiciero oscuro a familia concurrida
Este análisis de Gotham Knights lo hemos podido hacer sobre una copia de PC. Esto interesa también a términos de rendimiento y aquí tengo que traeros unas noticias algo desalentadoras. El juego está lejos de ser el desastre que fue en su momento Batma Arkham Knight en PC, pero tampoco podemos barrer debajo de la alfombra los numerosos problemas que presenta. Por una parte, sus crasheos casi constantes cuando intentamos volver a la base en viaje rápido, por otra, las continuas bajadas de frames que pega cuando sobrevolamos Gotham a mucha velocidad o decidimos viajar en la bat-moto hacen que jugar a Gotham Knights se resienta más de lo que me gustaría.
Luego hay diversos bugs de más o menos consideración, como misiones secundarias que no se completan, logros que no saltan cuando deberían hacerlo o enemigos que desaparecen del escenario o que se vuelven intocables. No son problemas que nos impidan disfrutar de la experiencia o acabarnos el juego sin esfuerzos, pero si que afean el conjunto mucho y nos hace plantearnos si realmente no deberían haber retrasado el lanzamiento unos meses más para que saliese más pulido. Sea como sea, espero que la versión que juguéis vosotros venga actualizada y no tengáis que pasar por tantos males.
En lo visual y sonoro, el juego es una delicia en PC jugando en configuraciones ultra, destacando el buen hacer de las luces y sombras en las noches de Gotham y el texturizado de los trajes de nuestros justicieros. Cabe destacar que tiene muchas opciones de configuración, incluso hace un uso excelente de las tecnologías DLSS y Ray Tracing de Nvidia, sin desmerecer tampoco a las numerosas funciones de accesibilidad para que nadie se quede fuera del llamamiento de Gotham.
Por último decir que Gotham Knigts ha sido una experiencia muy satisfactoria para mí, como buen fan que soy de las historias de DC Comics lo he disfrutado como un crío. Es el producto de Warner Bros. Games que más me ha gustado sobre el universo del caballero oscuro, con muy buenas ideas, un desarrollo loable y una batfamilia recreada con mucho acierto. Esperemos que le acompañe una buena remesa de actualizaciones y contenidos futuros para que la experiencia sea todavía más redonda.