World Of Warcraft Legion – Análisis PC

Si sois como yo, amantes del WoW original pero que con el tiempo, perdisteis la chispa, World Of Warcraft Legion os devolverá las ganas de vivir, virtualmente hablando. Aporta toda una nueva historia con la clase cazador de demonios y nos permite llegar hasta nivel 110. Si pensáis que no es mucho o que puede ser corto, primero entrad a probar esta nueva expansión.

Dejad atrás los bandos, ya no sois Horda o Alianza, ahora nos convertiremos en los héroes que quieren que el mundo no sea destruido, luchando codo a codo con quien antaño eran nuestros enemigos. Los cazadores de demonios son la última esperanza para vencer a la Legión Ardiente, obra de Sargeras. Con estos personajes tenemos varios cambios introducidos, haciendo algo más emocionante el regreso a los jugadores veteranos.

Empecemos por el nuevo personaje, el cazador de demonios, quien tiene ahora que elegir una especialización: Devastación o Venganza. Cada una de ellas otorgará unas fortalezas diferentes y sustituye los clásicos puntos de talento por un árbol más sencillo, en el que elegiremos un talento concreto según vayamos superando niveles, lo que determinará las habilidades del personaje.

A esto se le suma la visión espectral, útil para percibir más allá de lo que vemos en nuestra pantalla en determinados momentos de las misiones; y la metamorfosis, con la que podremos derrocar a los enemigos más fuertes, convirtiéndonos en entes demoníacos. Como buen demonio con alas, podremos planear y hacer dobles saltos, acciones más que útiles en multitud de ocasiones.

Otro nuevo elemento introducido junto con la clase cazador de demonio son los artefactos. Ya no son armas, ahora son artefactos, y los llevarás a dos manos. La subida de nivel de estos se hará a través de objetos que se consiguen en misiones y saqueos de cuerpos. Y es que tan solo llevarás contigo un tipo de artefacto dependiendo de tu especialización, así que la mejora de tu daño no dependerá de cambiar el arma, sino de los complementos que consigas.

¿Y dónde podremos poner en práctica todo esto? En las Islas Abruptas, el nuevo mapa que World of Warcraft Legion añade a Azeroth. En las diferentes zonas que encontramos se repite el contraste de paisajes que suele caracterizar a todos los reinos. Las misiones nos irán llevando a conocer nuevas zonas y se culmina en la ciudad de Suramar, donde encontraremos a los enemigos de más alto nivel (110) y uno de los diseños más destacados de esta nueva expansión. Cuidado si caéis aquí antes de tiempo y os cruzáis con algún hostil, porque no sobreviviréis, os lo digo por experiencia.

En World Of Warcraft Legion podemos hacer muchas cosas para ampliar experiencia de juego y completar las misiones principales. Podemos seguir cual trenecito todo lo que nos mandan, pero sin dejar de lado las obligaciones propias de clase. Para eso está la Sede de Clase, un pequeño reducto Illidari al que se accede a través de un portal en Dalaran. Aquí, iremos ganando experiencia extra con las misiones propias que nos vayan encomendando.

Aunque estos cambios introducidos mejoran la experiencia de juego, cierto es que me resulta mucho más fácil hacerme al nuevo juego que lo que me costó en su día cuando empecé a jugar con una maga no muerta hace años. Las misiones no tienen pérdida, la dificultad no es extremadamente alta y tal vez añore algo más de reto. Pero creed si os digo que, pese a que la nueva jugabilidad de WoW Legion se me antoja demasiado cómoda, el disfrute se encuentra en el seguimiento de la historia. Para los que nos gusta ahondar en ella, vamos a comprender porque la Legión quiere destruir el mundo, quienes son los traidores en nuestro bando y saber más sobre el mundo de World Of Warcraft.

Sumamos tan solo 10 niveles y ya os digo que no es corto. Hay mucho por hacer: historia principal, misiones secundarias, misiones de clase y mazmorras dan mucho de sí en esta expansión. Que no os dé pereza empezar, porque podéis crear un personaje y subir directamente a nivel 100 para comenzar esta nueva aventura. La búsqueda de grupos para raidear es también más fácil y se han mejorado las funciones sociales para conectar más a los jugadores. Y si queréis, la nueva funcionalidad de Battle.net para retransmitir en directo permite mostrar en vivo vuestras hazañas. Si algo me ha dejado fría es el apartado sonoro. Este juego se caracteriza por tener unos temas instrumentales extraordinarios, sin embargo, aparte del tema principal de entrada en el juego, no hay una melodía que, a mi, personalmente, me haga pararme a escucharla como hacía antes.

Los años flacos de World Of Warcraft repuntan con cada expansión y Legión es un soplo de aire fresco que hará a muchos quedarse más tiempo del que esperaban. Sin embargo, al igual que el tiempo a los héroes de Azeroth, la fórmula de Blizzard se agota y es posible, que los cambios introducidos no sean simples mejoras, sino un preludio para lo que pueda venir después. De momento, seguiremos cazando demonios en World Of Warcraft Legion.