Hace unos días, un tal Laurent Detoc (presidente de Ubisoft America) explicaba las razones del retraso de Watch Dogs, y hoy deja unas declaraciones sorprendentes, y es que el sandbox futurista nació de un proyecto cancelado. No solo eso, sino que ese proyecto tiene pinta de que iba a ser el próximo Driver:
Watch Dogs no nació como Watch Dogs. Estaban trabajando (el equipo de desarrollo) en un juego de conducción y tenían la licencia de Driver, pero eso fue hace años. Entonces pensamos «no, así no es como queremos hacer un juego de coches«. Con lo que lo cancelamos y lo comenzamos de nuevo. Estamos hablando de hace 3 años, pero algo de ese trabajo se ha aprovechado para Watch Dogs.
La decisión se tomó porque había otro juego de conducción (¿alguien ha dicho The Crew?) en desarrollo, y teníamos que hacer uno en el que el protagonista se baja del coche y hace otras cosas. Cambió algo del personal en el equipo, cambió el director creativo y comenzaron con un nuevo juego. No diría que Driver se convirtió en Watch Dogs, porque no es realmente lo que pasó. Lo que pasó es que un juego se canceló y se cogieron piezas de ese juego para construir uno nuevo.
Independientemente de lo que fuera hace tres años, esperamos que el resultado final bien valga su retraso hasta primavera de 2014. Watch Dogs saldrá para todas las plataformas de sobremesa: PlayStation 3, Xbox 360, Wii U, PC, PlayStation 4 y Xbox One.
Vía IGN