Bueno, yo también hubiera predicho que el nuevo juego de Link para Wii U y Nintendo Switch es una obra maestra sin sacarlo de la caja.
¡No queda nada! Aquí por la redacción estamos todos excitados con la llegada de The Legend of the Zelda: Breath of the Wild el próximo 3 de marzo para Wii U y Nintendo Switch. Mientras tanto, nuestros colegas de Edge Magazine han sido los primeros en mojarse y analizar – realmente parece que se les ha filtrado a los pobres – las nuevas aventuras de Link en su primer mundo abierto, y amigos, tenemos un nuevo inquilino en la casa de las matrículas de honor.
Será el próximo día 2 de marzo cuando se cumpla la fecha de embargo para que la prensa podamos publicar nuestra puntuación de Breath of the Wild. Seguro que no le pilla a nadie de sorpresa la cantidad ingente de dieces y sobresalientes que se va a llevar.
Pero ojo, que no se nos tache de faboyismo barato, que es que hay que ver el giro radical que Nintendo, liderado por la Master Sword de Eiji Aonuma, ha conseguido con esta nueva entrega de la saga The Legend of Zelda.
Por lo que comentan, provoca “un placer incesante y absoluto cuando te pierdes en su mundo”, por lo que tenemos una experiencia entre manos como nunca habíamos vivido en el universo del Reino de Hyrule.
Técnicamente, The Legend of Zelda: Breath of the Wild es lo más burro que puedes ver en Wii U. Su resolución se queda en 720p frente a los 900p de Nintendo Switch, pero ambos se mantienen estables a unos dignos 30fps, con algún pequeño y puntual bajón en situaciones muy determinadas del juego.
Prepárate para perderte en la inmensa densidad de The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Falta muy poco…