Seguro que muchos recordaréis la historia, resulta que Steam tuvo a bien reciclar ciertos aspectos similares a los que nos quería plantar Microsoft en su Xbox One. Básicamente, se trataba de coger uno de los pocos aspectos positivos del planteamiento original de la de Redmon, la posibilidad de compartir juegos digitales entre cuentas familiares, y pasarla por el filtro del amigo Newell. El resultado es Steam Family Sharing y ya está disponible para alegrar la existencia a todos los usuarios de la exitosa plataforma.
Así lo ha anunciado la propia Valve hoy mismo, ya podemos vincular hasta 10 cuentas «amigas» para uso y disfrute de todos los juegos de nuestra biblioteca.
Ahora bien, para los amantes de las técnicas prohibidas de la picaresca española, que sepáis que el dueño principal de los juegos digitales puede disponer de ellos cuando le plazca, con la consiguiente expulsión de la partida que tengan en curso todas nuestras cuentas compartidas. Apañados van los que quieran engañar a nuestro orondo amigo.
Fuente: Steam