Con el séptimo capítulo de Shameless se estrena la segunda mitad de la temporada. En este episodio y en los siguientes se irán definiendo las historias con las que se finalizará la temporada.
El séptimo capítulo de la séptima temporada ha sido algo insípido. No ha estado mal, como siempre el tiempo vuela con un episodio de Shameless, pero no ha sido gran cosa. En el capítulo 6 pudimos al menos ver cómo la trama de Carl tomaba un nuevo cauce, pero este capítulo ha sido bastante aburrido… Esto se debe a que este capítulo se sitúa en un punto intermedio de la temporada, donde se van zanjando algunos aspectos de la historia de cada personaje para dar pie a la resolución de la temporada con nuevos hechos.
Para empezar, en este capítulo Frank ha iniciado y concluido una de sus tretas, cuando normalmente le lleva varios episodios. Ha conseguido una educación privada para su hijo pequeño a su estilo: vociferar verdades que no gustan, y para callarlas le ofrecen algo a cambio. Es evidente que para Frank este es un capítulo de relleno, ya que normalmente suele rematar la temporada con algo grande, y el tema del colegio no creo que lo sea. Así que en los siguientes capítulos supongo que Frank empezará con alguna de las suyas.
Para Lip, este capítulo ha sido algo insulso también, en cuanto a este personaje se nos muestra algo importante: parece que se le ve involucrado en su nueva relación. Otro punto relevante es el tema de poder volver a la universidad, sólo espero que no siga con la misma actitud. Esa actitud que le dan a Lip en ocasiones no me gusta nada, ¿Por qué siendo tan inteligente toma decisiones tan estúpidas?. Ya veremos en que queda esto, pero esperemos volver a verlo en las aulas.
La parte de Debbie, casi resolutiva. Llevaba gran parte de la temporada centrándose su historia únicamente en conseguir dinero. En el siguiente capítulo se nos desvelarán bastantes hechos: si los servicios sociales se llevan a su hija, si se casa, si necesitará encontrar trabajo y si compartirá el piso con la hermana de su futuro marido o no.
En cuanto a a Ian, ha sido un capítulo aburrido la verdad. Simplemente ha probado algo nuevo, y es en lo que se ha basado todo el capítulo (y los anteriores más de lo mismo)…
Y por último Fiona, que sigue siendo un auténtico desastre. En este episodio se ha dado de bruces con la realidad: llevar un negocio es muy complicado. Y es que además ha adquirido un negocio sin tan si quiera preocuparse de cómo estaba. Sinceramente, creo que el final de esta temporada para Fiona va a ser el de siempre: un hostión tremendo (esta vez no a nivel sentimental, sino a nivel profesional y económico).
De Carl, cómo se esperaba no se sabe nada. Volverá hecho todo un hombre como el anunció hacia final de temporada.
En conclusión, este ha sido para mi el capítulo más aburrido de lo que va de temporada. No ha habido una gran aportación en ninguna de las tramasde los personajes, e incluso se han alargado demasiados aspectos como los problemas de la maternidad de Debbie, los negocios de Fiona y la relación de Ian. Esperemos que el siguiente capítulo traiga algo gordo, de no ser así, !aquí estaré para rajar culpables¡.