Ahora sí, empieza lo que para muchos es su primera generación de consolas (me incluyo). Estamos ya en los 80, en plena crisis de la industria del videojuego, acontecimiento que dio carpetazo a la segunda generación de consolas. Hagamos un poco de historia y repasemos las mayores causas de este acontecimiento.
Como hemos podido comprobar en la pasada entrega, eran 11 las consolas existentes en el mercado, sin contar con sus clones y revisiones. ¿A alguien le parece medianamente normal eso?. Si ya hoy en día tenemos 3 consolas oficialmente en el mercado sin contar con las portátiles, y ya parecen suficientes, imaginaros que existiesen hoy en día 11 consolas disponibles, sería un caos tremendo.
Otro aspecto muy relacionado con el número de consolas, es el gran número de juegos de baja calidad. Pocos juegos he mostrado en la pasada generación que realmente mereciesen la pena, incluso algunos de ellos eran ports y versiones modificadas entre ellas. En esa época lo que se llevaba realmente era Asteroids, Solaris, Donkey Kong, Mario Bros, Pac-Man y para de contar. Todo esto ayudó en este crash y que compañías como Magnavox, Coleco y posteriormente Atari se fueran al traste, pese a que esta última consiguió sacar en el mercado una consola en esta generación. Además y si por si todo esto fuera poco, el PC empezó a ser una opción cada vez más atractiva. Con todo este ambiente montado, dos compañías fueron las que se apretaron el cinturón y consiguieron salvar a esta industria que estaba en muy grave peligro. Esas compañías fueron Nintendo y Sega. Famicom y Master System partieron la pana en esta tercera generación y se repartieron la mayor parte del pastel.
Para entrar a empezar a comparar los juegos, ya que muchos de ellos son de finales de generación, creo que es necesario que empecemos por aquellos juegos de salida de las consolas y poder así comparar como los títulos fueron evolucionando y mejorando con el paso del tiempo hasta llegar hasta donde nos interesa. Uno de los títulos de salida de la consola fue este del que vamos a hablar ahora y que ya pudimos ver en la generación pasada. Donkey Kong seguía haciendo furor en las máquinas de ocio de todos los lugares del mundo, por lo que una nueva reconversión estaba más que cantada. Con grandes mejoras, tanto gráficas como sonoras se presentaba de salida junto con Donley Kong Jr y Popeye para la NES el juego del gorila roba-princesas y el saltador más famoso de los videojuegos:
En esta generación existieron además de estas 3 consolas de las que voy a hablar, otras máquinas que apenas tuvieron repercusión en el mercado global, como son Zemmix, CV-1000, Acción Max o la Atari XE Video Game System (híbrido entre consola y ordenador), pero lógicamente nos centraremos en las consolas más importantes, y sobretodo en los juegos que en esta generación empezaron realmente a freír los circuitos de las consolas. Se da por finalizada esta generación cuando los 8-bits quedaron obsoletos frente a las nuevas consolas de 16-bits.
Seguramente la consola que muchos habéis tenido en casa se asemejaba en cierta manera a esta. Si bien Nintendo se afianzo en el mercado de los videojuegos gracias a su consola Famicom (como se la conoció en Asia), no consiguió arrebatar el trono en nuestro país a Sega esta generación.
La Famicom salió a la venta en Japón en 1983 y no llegó a Europa y América pasados unos dos años, ya renovada y exteriormente como la conocemos. No hace falta que incidamos en su éxito porque seguro que todos tenemos una pequeña idea de todo lo que vendió. Y eso que en Nintendo no las tenían todas consigo tras la debacle de la industria. Por ello se aseguraron todo lo que pudieron de que sería un éxito y pese a unos fallos en las primeras Famicom, tras ser arreglado, fue un no parar de vender superando ampliamente a su rival en eses momentos que era la Sega SG-1000.
Técnicamente la consola contaba con un microprocesador de 8 bits, sonido entre 54 Hz y 28 kHz, 2 kb de RAM (que podían aumentar gracias a la memoria en los cartuchos de los juegos) y una resolución de 256 x 240.
El héroe de los juegos de Donkey Kong ya hacía tiempo que había empezado a volar en solitario. Desde el título Mario Bros. fueron muchos los que se quedaron con la cara de este simpático fontanero italiano con bigote y con su hermano. Tras ese título llegó a Nintendo y de forma exclusiva Super Mario Bros. donde nos encontrábamos con un plataformas que aunque simple, exigía una alto grado de habilidad en ciertos momentos y cuanto más avanzabamos en la aventura. Pudiendo escoger entre los dos hermanos, esta vez el enemigo era Bowser, el rey de los Koopas, que secuestra a la princesa del Reino Champiñón Peach.
Por este motivo los hermanos Mario van a su rescate recorriendo un gran número de niveles hasta conseguir salvarla. Y aunque este es el argumento del primer juego, también se puede aplicar a este Super Mario Bros 3, pero todo multiplicado por 10. En este juego, tendremos unos mini-mapas que representan cada mundo, y en los cuales nos podremos ir moviendo a nuestro antojo escogiendo aquellos que tengamos disponibles.
Además habrá unos “check-points” que servirán para jugar a pequeños minijuegos que nos darán items para poder ser utilizados, como la hoja que convierte a los hermanos mario en mapache y podremos coger velocidad y volar durante un pequeño período de tiempo. Por si fuera poco, cada vez que terminemos una misión, podremos seleccionar de forma aleatoria entre tres iconos que nos proporcionarán a modo de tragaperras, más vidas en nuestra partida, aumentando la cantidad si conseguimos 3 iconos iguales.
Realmente no llegué a jugar a la versión NES de este juego, pero sí a la versión SNES, con su gran apartado gráfico. Pero informándome sobre este juego no he dudado en ponerlo en esta lista, ya que salvando las distancias, la experiencia jugable es totalmente similar, por lo que el cambio se nota únicamente en los gráficos por la evidente diferencia de potencia de ambas máquinas. En esta versión de la NES estamos ante un título que llegó al techo gráfico y técnico de la consola, que ya arrastraba unos años de vigencia en el mercado, por lo que los desarrolladores y programadores estaban funcionando a pleno rendimiento y conscientes de todas las posibilidades que la consola les podía llegar a ofrecer.
La diferencia que existe entre el primer Super Mario y este nos puede llegar a hacer pensar que estamos ante dos máquinas diferentes. Esta idea se hace patente en el profundo detalle de las texturas en los personajes y escenarios del juego. Y lo mismo ocurre en el sonido y los efectos del juego. Todo un goce visual y jugable para un juego que traspasa el tiempo y será un clásico por siempre.
Una franquicia que sí nació en Nintendo fue la de Castlevania. Conocida en Japón como Akumajō Dracula, nos encontramos ante la historia de la familia Belmont en su lucha contra Drácula, el demonio que bebe sangre y resucita cada cierto tiempo, por lo que el legado de esta familia será que sus predecesores lo sigan derrotando cada vez que este aparece.
Tras el intento de convertir a la franquicia en un RPG de los de la época en la segunda entrega, en esta ocasión se optó por retomar la senda de acción y plataformas que engrandeció la franquicia, y además con gran éxito ya que hoy en día, este título continúa teniendo muchos fans que lo catalogan como el mejor Castlevania de todos los que ha habido hasta ahora, y que no son precisamente pocos.
Gráficamente, además de ser el mejor de la franquicia en NES, también estamos ante uno de los mejores de la generación. Con una mayor fluidez de movimiento de los enemigos y de nuestro personaje, nos encontramos también con unos escenarios mucho más detallados de lo que la Nintendo nos tiene acostumbrados, siendo estos incluso dinámicos en la aventura.
La bola rosada de Nintendo tuvo su primera aparición en una consola de sobremesa con este Kirby’s Adventure que salió ya en los últimos coletazos de la generación. Por lo tanto el nivel de calidad del título ya os imagináis que es bastante alto. Y tan alto que podemos decir abiertamente que estamos ante el juego con mejores gráficos y que más exigió a la consola de Nintendo.
El cartucho del juego en sí dispuso de un “extra” de memoria de 6 bits para poder correr el juego, algo que lo hizo un juego único en la consola. El nivel de colorido de los escenarios, al igual que el de los personajes que a su vez están perfectamente definidos, las animaciones, el sonido… Bueno en definitiva, que estamos ante un juego tan redondo como el propio Kirby.
Aunque si bien no fue un éxito de ventas ya que se vio superado por el éxito de las consolas de cuarta generación, ya comenzó a hacerse un nombre tanto en NES como en Game Boy, algo que sigue haciendo aún a día de hoy lanzando juegazos cada vez más ingeniosos y originales, manteniendo siempre ese toque arcade y sorprendente que tanto caracteriza al personaje, uno de los más queridos pero a la vez olvidados de Nintendo.
Definitivamente, Kirby’s Adventure es el top de los juegos de NES que llevaron la consola al límite, y creo que este video gameplay de arriba así lo demuestra.
Tras la irrupción de Nintendo con su Famicom, Sega se vio obligada a responder. Pese a que en este apartado comentaremos un poco la jugada de la compañía japonesa, no podemos olvidarnos de donde viene la conocida Sega Mater System. Esta consola que muchos tendríais por casa fue la predecesora de otra anterior, la conocida como Mark III. Esta máquina ya era de por sí superior a la Famicom pero no vio la luz fuera de tierras japonesas. Por ello desde Sega pensaron que para competir con Nintendo en todo el mundo, debían de cambiar su estrategia de mercado. A causa de esto la Mark III sufrió un rediseño, además de ciertas mejoras internas, y fue rebautizada como Sega Master System.
Con esta consola comenzó una gran rivalidad, comparada a aquellos enfrentamientos entre Atari y Magnabox, que tendría distintos ganadores dependiendo del territorio. Realmente Sega no lo tenía nada fácil. Nintendo ocupaba los hogares de muchas familias y no fue sencillo hacerse un hueco. Pese a que la Master System era una consola superior (gráficos más coloristas y un mejor sonido, aunque el sintetizador de audio “bueno” no llegó a salir de Japón para abaratar costes) el bajo precio y las licencias que poseía Nintendo le lastraron más ventas de las que les gustaría.
La consola, además de la Mark III y esta, llegó a tener más versiones (Master System II, Master System III, Master System Super Compact y Master System GIRL). Pese a ser un fracaso en América, donde Sega cedió los derechos de venta, no le fue mal en Europa, Australia y sobretodo en Brasil. Gracias a estos mercados, la consola tendría su siguiente sucesora.
No podemos empezar más fuerte el repaso a los tres juegos que llegaron al techo de Master System. Estamos ante el rey en este aspecto, de igual manera que lo fue Kirby’s Adventure en Famicom. Y es que el juego de Aladdín, basado en la película de animación de Disney con el mismo nombre y que muchos vimos cuando aún nos estaban callendo los dientes de leche, resultó ser todo un espectáculo visual que Nintendo solo pudo alcanzar con Super Nintendo.
Realmente resulta difícil de creer que Master System, ya de por sí con unas especificaciones altas, pudiese mover lo que veíamos en pantalla. No tuve ocasión de probarlo en su momento, pero viendo los gameplays del título, en aquella época podría tratarse de la experiencia más realista de una película de animación.
Podría afirmar sin miedo a equivocarme mucho de que estamos ante el juego con el mejor apartado gráfico de toda esta tercera generación. Aunque este hecho no se vislumbra en todo el apartado completo del juego, ya que alterna algunas fases mediocres con otras que son un auténtico espectáculo visual para la época, con colores vivos, escenarios vistosos y una profundidad en 3D nunca vista hasta el año 1994. El amplio nivel de detalle y unas animaciones conseguidas son también otros motivos para confirmar lo que hasta ahora os he comentado.
Sin embargo este juego de acción y plataformas también tiene sus puntos negativos, y es que su corta duración (podía pasarse en media hora) y su escasa dificultad le lastran enormemente, pudiendo parecer que estamos ante una película interactiva al uso. De todas formas eso no es excusa para que este en el nº1 de este ranking personal de los rompe consolas, y es que ningún poseedor de Master System debería perderse la oportunidad de ver por sí mismo y en su pantalla de tubo lo que este juego era capaz de demostrar.
Hasta la llegada del erizo azul a la consola de Sega, nadie podía pensar que algún nuevo juego lograría superar a los gráficos vistos en el primer Sonic. Pero tuvo que aparecer su continuación para desengañar a los poseedores de Master System y ver que la consola no había tocado techo todavía. Nos encontramos con el, para muchos, mejor juego de Sonic de la historia. Y si a todo esto añadimos que las especificaciones técnicas para le época eran de relumbrón, podemos dar por hecho que no hay muchos juegos que le miren a los ojos a este Sonic The Hedgehog 2 en la tercera generación de consolas.
Contaba con unos gráficos muchos más vistosos y de igual manera pulió muchos de los fallos y glitches que tenía el primer Sonic the Hedgehog. Y es que yo a este título le tengo un cariño especial ya que fue la inclusión por primera vez de mi personaje preferido del mundo de los videojuegos, Miles “Tails” Prower. Todos aquellos que lo hayan probado podrán estar de acuerdo conmigo en incluirlo en este top 3 de juegos de Master System. y si no lo están simplemente tengo que recordarles algunas fases como las secciones en ala delta de Sky High Zone, o los paseos por Underground Zone, Aqua Lake Zone o Scrambled Egg Zone.
Además aquí nos olvidábamos de Robotnik hasta el final del título, ya que los sub-jefes de cada acto sería robots cada uno con un diseño propio y personal, que daba más variedad al título. De igual forma, la calidad del sonido se ve notablemente mejorada. En definitiva y para no explayarme mucho, podéis comprobar en los siguientes vídeos las diferencias entre el primer y segundo título en cuanto a calidad gráfica y así me podáis entender mejor.
Sonic the Hedgehog:
Sonic the Hedgehog 2:
Terminamos con uno de los juegos más clásicos de la Master System, de Sega y de toda la generación de consolas. Y es que pese a que hoy en día la saga Ghost & Goblins ya está de capa caída, en esa época pocas franquicias como la de Sir Arthur existían como esta. La de monedas y monedas que nos habremos gastado más de uno en las máquinas arcades de este emblemático juego. Y efectivamente, este título fue el primero de esta lista en salir a la luz y tuvo su momento álgido gráficamente hablando.
Para que veáis la gran calidad que atesoraba este título, deciros que su futura versión de 16 bits era casi idéntica a esta. Y con esto no quiero decir que el título fuese malo, todo lo contrario. Pese a reducir razonablemente su calidad de vídeo y de sonido con respecto a la versión arcade, el juego era totalmente fiel a su sucesor, por lo que imaginaros la impresión que nos podía dar este título con respecto a la época en la que salió a la venta.
Una muestra más de la increíble capacidad que poseía Master System que pese a sus exclusivas, siempre ha tenido grandes juegos de mucha calidad gracias a la gente que estaba detrás de estos título. Os dejamos este vídeo para que lo comprobéis por vosotros mismos:
La Atari 7800 ProSystem es una consola muy poco apreciada y que paso por alto en esta generación y para mucha gente. Fue anunciada el 21 de mayo de 1984, con un precio de 140 dólares. También sería 100% compatible con todos los juegos de las consolas anteriores. Tuvo doce títulos de lanzamiento. Para la época y el momento en que fue anunciado mucha gente se entusiasmó con las capacidades de esta consola, que conseguiría devolver a Atari el éxito perdido.
Atari tristemente no consiguió retomar y la compañía tuvo que ser vendida. La producción se paró en unas escasas unidades fabricadas y se dejó en el olvido hasta 1986, donde sufrió un re-lanzamiento.
En enero de 1986, la Atari 7800 salió a la venta de nuevo para poder competir ese año con la NES y la Sega Master System. Poseía un sencillo joystick digital (Proline), una versión mejorada de los controles de la 5200 pero que no permitía jugar de la misma manera que las otras consolas, aunque era compatible con todos los periféricos de las anteriores Atari y futuros modelos que mejoraban la experiencia de juego. Aunque mención aparte merece su otro controlador, ya más en la línea de un mando corriente de los de la época pero con una diferencia que lo hace especial. Y es que tenía un stick digital (el primero de la historia en una consola) que podíamos “desenroscar” para convertirlo en un stick digital corriente.
Gráficamente, la 7800 era una máquina excelente para su época, rivalizando e incluso superando la NES y Sega Master System en algunos aspectos. Su punto débil era el sonido, ya que utiliza el mismo chip de sonido antiguo de la Atari 2600. En lo que sí que ganaba por goleada a sus competidores era en tamaño. La consola era un armatoste enorme que ocupaba unos 29 x 22 cm.
Existen casi 60 títulos disponibles para la consola, muchos de ellos realmente bueno y que son joyas de coleccionista hoy en día. Como curiosidad tenemos que decir que hasta hace unos años esta consola aún no había sido emulada nunca para PC. Y a partir de que se consiguió algunos desarrolladores y gente independiente volvieron a desarrollar nuevos títulos para estos emuladores. Y es más, los títulos de esta consola son de código abierto, por lo que cualquier persona con los conocimientos suficientes puede modificar un juego a su gusto.
Un juego clásico donde los haya. Vió la luz por SNK y en pleno éxito de la saga Comandos. La compañía sacó un juego que intentase superarlo y ofrecer algo distinto al clásico juego de guerra. Y valla si lo consiguió. Según sus creadores, que más adelante crearían la franquicia King of Fighters, se inspiraron en las películas de Rambo. Además como curiosidad, ambos personajes (Ralf y Clark) serían rescatados por SNK en una aparición como personajes seleccionables en Metal Slug.
El juego, que en un principio se desarrolló para recreativas y como podréis ver en el siguiente vídeo, era un portento gráfico para la época. Además fue una innovación jugable para su época ya que permitía las 8 direcciones en el joystick cuando movamos el personaje. También fue pionero a la hora de poder jugar en cooperativo dos personas en un juego de este tipo. En resumen, todo un juegazo para la época y que creó escuela en este tipo de títulos.
Otro gran juego de comienzos de generación. Y aunque pueda parecer poca cosa, es evidente que con solo ver un gameplay muchos comprenderán que este título aparezca en este artículo. Es evidente que muchos de los juegos de Atari comparados con, por ejemplo, el Aladdin de Master System, no luzcan tan espectaculares. Pero hay que pensar que la Atari 7800 tuvo una vida mucho más corta que sus competidoras, por lo que para la época que llegó a englobar, juegos como este Dark Chambers, eran potentísimos.
Con el cine viviendo en ese momento grandes adaptaciones de obras de fantasía como Willow, Dentro del laberinto o La Historia Interminable, este Dark Chambers tuvo un gran éxito y cogía ideas de otros títulos del estilo (para los que tengan una edad les recordará a Gaunlet)que se introducían en los juegos de rol electrónicos. Este título ya vió la luz en la Atari 2600 aunque aquí lo encontraremos bastante renovado. Y con que veáis estos dos vídeos, correspondientes a cada versión, podéis apreciarlo claramente:
Atari 2600
Atari 7800
En el juego encarnábamos a un explorador en un laberinto subterráneo. Nuestro objetivo es sobrevivir los 26 diferentes niveles y recolectar la mayor cantidad de tesoros escondidos en algún lugar de cada uno de los niveles. El juego permitía disfrutarse tanto en solitario como con otro compañero más.
Desarrollado por Tynesoft para Atari 7800, posiblemente era un port del juego para Amiga Sirius 7. Existió un prototipo de este juego, que estuvo en manos de un conocido coleccionista durante mucho tiempo, aunque ese título era famoso por ser inestable y se bloqueaba frecuentemente, sigue siendo a día de hoy un objeto de coleccionista.
Sirius un juego de disparos con scroll horizontal que todos aquellos que estén familiarizados con juegos como Gradius o R-Type se sentirían agusto. El juego consta de cuatro niveles diferentes, cada uno con su propia temática y jefe. Sirius es un claro ejemplo que demuestra de lo que era capaz de hacer la Atari 7800 superando a prácticamente todo el catálogo de las otras consolas en aquella época. Era un juego extremadamente difícil y para un solo jugador con multitud de opciones y power-ups.
Realmente este juego es toda una leyenda por estos aspectos y hará las delicias de cualquier fan retro que posea una Atari 7800.
Con este título y esta consola damos por terminada la generación. Nos espera una cuarta generación, llena de juegazos que trasparán las generaciones y que muchos recordarán como una de las mejores de la historia. Y aunque también analizaremos muchos juegos y consolas, seguramente sólo penséis en una sola y que resume en dos palabras lo que será la próxima generación: Super Nintendo.
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