Otra de las exclusividades de Xbox One, conocida como Quantum Break, dispondrá de un sistema pionero en el mundo de los videojuegos. El Digital Molecular Matter (DMM) es un sistema que lleva usándose relativamente poco en el cine y la publicidad, y ahora nos permitirá flipar colorines en esta next-gen.
Este sistema, creado por Pixelux, permite crear explosiones tridimensionales ultrarrealistas, simulando el efecto a nivel granular, y en hasta 14 tipos de material distintos. Ya saben lo que pasa con un trozo de madera cuando se parte, que saltan las astillitas, y no se rompen pixelacos gordos como ha ido sucediendo en los videojuegos. Y para que las consolas no salgan ardiendo más de la cuenta, de esta magia se encargará la propia aceleración gráfica de la GPU, dejando margen a la CPU.
Este título, de ambiente futurista, está siendo desarrollado por Remedy Entertaiment, con el apoyo de un científico del CERN, y así respetar la física teórica dentro de la propia trama. Mikko Uromo ha declarado que esta tecnología será fundamental dentro de la gestación de Quantum Break, y que nosotros los jugones disfrutaremos todas esas amalgamas de trocitos volando en auténtico tiempo real.
¿Cumplirán las expectativas? A mí todo esto me recuerda a la malograda cinta R.I.P.D..
Fuente: Pixelux Entertaiment