A estas alturas a nadie le cogerá por sorpresa el anuncio por parte de Sony de la PlayStation 4 Pro en el PlayStation Meeting del siete de septiembre. La «nueva» consola de la empresa nipona llegará al mercado con la intención de ser exactamente igual que la versión existente en la actualidad, pero con un maravilloso atrayente para comprar nuevos televisores como es la posibilidad de reproducir juegos en 4K. Y no subrayo juegos por casualidad, como verán a continuación.
Y es que una -en gran medida la única, de hecho- de las ventajas de adquirir esta versión respecto a la estándar de la PS4 es la ya mencionada capacidad de reproducir contenido en 3840 x 2160 píxeles. Sin embargo, esta definición solo podrá ser alcanzada en los videojuegos que así lo permitan, ya que la PlayStation Pro no incluye reproductor de Blu-ray 4K. ¿Y qué significa eso? Pues que no puede reproducir películas en físico a esa calidad.
En cuanto a las especificaciones técnicas en sí misma, Sony ha querido lucir la potencia de su consola. La verdad es que es cierto, resulta ser más potente de lo que era la original, el problema es que será usada para las mismas obras y básicamente la única diferencia radica en una ligeramente mejor resolución. Vaya, parece que estamos llegando a una era en la que se hacen remasterizaciones incluso de las consolas.
He aquí sus características al completo:
- Procesador x86-64 AMD Jaguar de 8 núcleos
- GPU de 4.20 Teraflops AMD Radeon Based Graphics Engine
- 8GB de RAM GDDR5
- 1TB de disco duro
Que no os engañen los «Teraflops AMD Radeon Based Graphics Engine», lo cierto es que si tienes una PS4 adquirir esta versión es despilfarrar el dinero, por muy «Pro» que sea. Y si a estas alturas no tienes una es porque o no tienes dinero o no la quieres, así que pongo en duda la cantidad de personas que pueden estar interesadas en esta versión…