Un grupo de estadounidenses aficionados (por decir algo) de Devil May Cry han requerido a su presidente para que retire el juego de las tiendas, ¿será por los nuevos trajes?. Así se lo han hecho saber a través de una petición en la web oficial de la Casa Blanca.
Norteamericano medio pidiendo cosas.
La razón principal que esgrimen este grupo es que el juego ha cambiado tanto desde sus predecesores que realmente insulta a los consumidores durante la partida.
Nosotros, como consumidores, ni queríamos ni necesitábamos este reinicio, y creemos que viola nuestros derechos a elegir entre el original o éste
Mientras tanto, el juego se sitúa como el más vendido en Reino Unido y la crítica internacional alaba el trabajo bien hecho. Pues eso.
Fuente: Gameranx