Mientras esperamos las súper maquinas (cada vez estoy mas convencido de que no serán tan súper) de Sony y Microsoft que enterrarán a las actuales Xbox 360 y PlayStation 3, nos llega como sorpresa el nacimiento de una nueva consola. Se trata de Ouya, una consola basada el sistema operativo Android y que llega para adaptarse a un negocio totalmente abierto, tanto el hardware que será hackeable, como sus títulos que será free-to-play.
La consola, a pesar de utilizar Android, sería una sobremesa en toda regla con conexión al televisor como viene siendo habitual desde tiempos lejanos. El precio fijado para la máquina es de 99 dólares -unos 80 euros-.
Esta nueva plataforma vendrá con un completo desarrollo que permitirá a los desarrolladores publicar sus propios trabajos borrando de un plumazo al editor. Habrá que ver, una vez en la calle, como se haría este proceso ya que sin tener los mínimos de calidad podríamos encontrarnos no ya con desastres jugables sino que con videojuegos que podrían poner en peligro la propia consola.
En el proyecto, según The Verge, podemos encontrar a personalidades como Muffi Ghadiali, del desarrollo del Kindle de Amazon, Ed Fries, ex-vicepresidente de la división Xbox en Microsoft o Julie Uhrman, fundadora y CEO de Ouya, que viene de ocupar altos cargos en IGN.