No me tiembla la mano al decir que Nintendo ahora mismo está en una situación mala. Por muchas vueltas que se le dé al asunto y por mucho que se miren las últimas noticias con una perspectiva optimista, Nintendo está caminando por una cuerda. A cada lado tiene un abismo y solo si toma las medidas correctas podrá dar un paso detrás de otro para avanzar en lugar de caerse.
A lo largo y ancho de Internet han surgido en los últimos días multitud de opiniones sobre lo que debería hacer Nintendo para sobrevivir a esta crisis. Por un lado están los que abogan claramente porque pasen a convertirse en desarrolladora third party, por otro están aquellos que directamente afirman que deben sacar una consola lo antes posible para competir con One y PS4 en potencia. Cualquiera de estas posturas es total y absolutamente errónea, y sería el principio del fin para La Gran N. Elegir entre estas opciones sería como elegir si caerse por la izquierda o por la derecha. Y para ilustrar esto solo hace faltar girar la vista hacia SEGA, que también pasó por una crisis, optó por las dos estrategias ya mencionadas y actualmente no es ni la sombra de lo que fue.
Y es que Nintendo es quizás la compañía que más disparidad de opiniones genera entre los usuarios de a pie. La actitud para con Nintendo es muy maniqueísta: o eres un gran fan o eres un gran detractor, raramente hay términos medios. Y como siempre pasa en este mundo, los que hablan mal de algo se hacen oír más y generan una corriente a la que muchos se ven arrastrados. Sin duda es muy curioso ver como se aboga porque Nintendo se vuelva third party por tener una consola que está yendo mal ahora pero no se le pide lo mismo a Sony, que está en una situación parecida, o a Microsoft que según las últimas informaciones pierde una cantidad de dinero brutal en la división de Xbox.
Ahora bien, asumiendo que la situación es mala y que tanto volverse third como sacar una nueva consola son malas decisiones que llevarán finalmente al fracaso, ¿qué es lo que debe hacer Nintendo? Aguantar el tirón, ni más ni menos. Las generaciones de consolas son como una carrera, si tienes una mala salida ya es casi imposible que acabes en primer lugar. Y Nintendo ha tenido una muy mala salida, tanto por los fallos de comunicación sobre qué es Wii U como por la ausencia de exclusivos de calidad por querer darle cancha a las third. Esas mismas third que luego han decidido pasar olímpicamente de Wii U. Por tanto, la única opción para Ninti ahora mismo es aguantar y preparar de la mejor manera posible el lanzamiento de su siguiente consola de la mejor manera posible.
La mejor manera para realizar un gran lanzamiento es tener un gran final en la anterior generación. Por tanto, Nintendo tendría que estar los próximos años nutriendo de grandes exclusivos propios a Wii U y comenzar a crear nuevas IP de una vez. Si hacen eso, quizá no repitan el éxito de Wii, pero sin duda marcarán un camino claro que les pondrá las cosas muy fáciles cuando decidan sacar su nueva consola, como bien ha mostrado Sony con PS3 y PS4. Porque si algo está claro es que Wii U no ha vendido tanto como debería por la gran cantidad de juegos infantiles y mal hechos que recibió Wii en su día.
Y es que con Wii nos hemos topado de lleno con la misma situación que se dio en Estados Unidos en los años 80. En 1983, los videojuegos movían 3.200 millones de dólares, mientras que en 1985 solo eran 100 millones. ¿Por qué pasó esto? Porque todo el mundo que podía hacer juegos, hacía juegos, lo que resultó en una inundación de juegos de mala calidad que hicieron perder la confianza al consumidor. Pero justo en ese momento llegó Nintendo con su fantástica NES a territorio americano y revitalizó la industria de nuevo. Todos los juegos de aquel entonces venían con un sello de calidad que aseguraba a los clientes que tenían en sus manos un juego realmente bueno y que merecía la pena comprar. Es muy conocida esa anécdota que Yamauchi supervisaba todo lo que iba a salir en su consola y si no le gustaba, no salía. Creo fervientemente que Nintendo debería recuperar esta tradición ya y no permitir que Wii U se llene con juegos para niños hechos de forma rápida. Si todo lo que se publicase en Wii U pasara antes unos controles de calidad en las oficinas centrales de Tokyo, Nintendo se quitaría por fin esa errónea etiqueta de compañía casual o para niños que algunos le han impuesto.
Aparte de esta limpieza y regulación en cuanto a juegos, también debería haber un cambio importante en la compañía: Iwata y Miyamoto deben dejar sus puestos en la directiva. Reconozco que son grandes figuras y que han hecho mucho bien a lo largo de los años, pero Nintendo tienen que reinventarse a sí misma y cambiar sus procedimientos. Por tanto, Iwata y Miyamoto, que se encuentran anclados en el pasado, deberían pasar al consejo de administración y dejar la dirección en manos más nuevas y jóvenes. Con tantos años en la compañía a sus espaldas deberían, por su experiencia, establecer las metas mientras que nuevos directivos con nuevas ideas deberían establecer la estrategia a seguir para llegar a esas metas.
Finalmente, y en esta ocasión sí menos importante, la potencia de su hardware. Yo soy un firme defensor de que Nintendo no debe ir a las third, sino que tiene que ser al contrario. Pero hacerles un poco más fácil el camino le haría a Nintendo mucho bien. Si bien quizás la política de precios ajustados e innovación, con respecto a las consolas, en ciertos aspectos es acertada, en otros está resultando un lastre. Nintendo debería apañárselas para conseguir que su próxima consola fuera innovadora, a la vez que potente y más barata que la competencia. Tampoco hace falta que estén a la par que Sony o Microsoft, o incluso que les superen, basta con que se quede cerca y pueda soportar decentemente los juegos multiplataforma. Y si los datos que han salido de esa llamada Fusion Terminal se acercan a la realidad, quizá está parte ya se hayan decidido a cumplirla.
Por tanto, Nintendo no debe volverse desarrolladora third party. Llevar Zelda o Mario a las consolas de Sony o Microsoft sería pan para hoy y hambre para mañana. Hay otras muchas cosas que se pueden hacer antes que bajar los brazos y fallarle a tu imagen y a tus usuarios fieles de esa manera. Nintendo antes muerta que vendida.