Crítica de One Piece 841

La furia de Big Mom llega a límites insospechados. Los Mugiwara, el Germa 66 y las fuerzas de Bege están completamente sobrepasadas en One Piece 841.

El lío sigue creciendo en Whole Cake Island. No se le ve un final claro a todo esto pese a que, a veces, hay un pequeño atisbo de esperanza. One Piece 841 nos deja ver a una Big Mom furiosa y peleando. Aunque no en serio.

Pero no es la única. El Germa 66 también despliega su potencial y hasta Luffy tiene que salir de su «escondite» para ayudar en la huída. La cosa es ¿cómo narices va a acabar todo esto?

Luffy vs Big Mom

Muchas veces hemos escuchado a Luffy amenazar a Big Mom. Sin embargo, el capitán de los sombrero de paja aún no se había encontrado cara a cara con la Yonkou. Desde la isla Gyojin Luffy le tenía ganas. Quería «patearle el trasero» para hacer de esa isla su territorio.

También hubo un casi enfrentamiento cuando estuvo preso en Whole Cake Chateau. Allí volvió a amenazar a Big Mom que, por su parte, no cayó en la trampa.

Pero Luffy sí. Luffy ha caído en la palabrería de la emperatriz en algo que no me ha gustado demasiado. Y es que, si bien es cierto que One Piece es muy fiel a casi todo lo que dice, en esta ocasión hay algo que me chirría.

¿Os acordáis cuando Luffy estuvo en Jaja y se enfrentó a Bellamy? En esa saga, Luffy hizo como Shanks y no cayó en las provocaciones que lo tachaban de inútil, cobarde o pobre pirara. Solamente actuó cuando atacaron a sus amigos o aliados.

En esta ocasión, pese a que el primer golpe ha sido para defender a Reiju, el segundo ha sido por la provocación de la Yonkou. Y esto es lo que no entiendo. ¿Por qué cae en esa provocación? Sabe que hay cosas más importantes. Bellamy fue doscientas veces más irritante que la emperatriz, y sin embargo, ha caído con ella.

Nunca terminó de cuadrarme ese capítulo en la historia del manga y el anime. Me pareció demasiado forzado. Muy artificial. Y le pasa factura ahora. Casi 700 capítulos después.

El poder del Germa 66

Hasta la fecha, tampoco habíamos visto pelear al Germa 66 con todo su potencial. Unas cuantas leches al pobre de Sanji no son peleas. Pero lo cierto y verdad es que hoy han vuelto a dejarse ver un poco dando leches.

Aún queda por ver que se luzcan más. Sobre todo porque queremos ver de lo que son capaces esos trajes. Que un par de puñetazos con efecto no valen. Pero parece que aún vamos a tener que esperar un poco.

Pese a ver a Oven y Smoothie (cuarto y segunda hija) pelear contra Niji e Ichiji, la cosa ha quedado muy en empate. Su misión era ayudar a escapar a Caesar y Bege. Y lo han hecho. Pero no nos han dejado nada espectacular.

Por el momento nos tendremos que conformar con esto. La misión es de huída. Enfrentarse a la familia de Big Mom en este sitio y bajo estas circunstancias es un suicidio. Y dado que es la primera vez que vemos a los Mugiwara en esta tesitura, es normal que se den estas situaciones de «casi peleas».

Y ahora qué

Con el muro caído, Bege casi fuera de peligro pero con Luffy, Sanji, Judge y el Germa 66 en la plaza de la boda todavía, la cosa no está clara. Hay muchas cosas que están fuera de controlo. Para todos los bandos. Y no se ve un claro final en todo esto.

Luffy ahora mismo está K.O. No queda muy claro por qué se le ha acabado el Gear Forth tan rápido, pero no puede pelear. Judge ha caído bajo las garras (y nunca mejor dicho) de Big Mom. Y si ni Luffy con su máximo poder ha podido hacerle «nada» a la Yonkou ¿cómo lo van a hacer los Vinsmoke teniendo al resto de la familia por delante?

La única salvación tiene pinta de ser algo que ocurrirá con respecto a la Tamatebako. Demasiada atención le están prestando al tesoro del mar. Y dudo mucho que sea para presentar aeste miembro del CP0 únicamente.

La caja (que os recuerdo es una potente bomba), está pegando botes por el borde del Chateau de Big Mom. ¿Acabará estallando o pasará alguna otra cosa? Hagan sus apuestas.