One Piece 811 nos deja una imagen insólita en el mundo de Oda. Luffy y Nami están en unos apuros que no va a ser fácil sortear.
Antes de nada, quería pediros disculpas por tardar en sacar esta crítica. Por temas de salud se me ha retrasado un poco, pero aquí os la traigo para hablar de One Piece 811. Y sí, solamente hablamos del anime, no entramos a valorar para nada el manga.
Esto lo hago porque este formato es el que la gente disfruta más y que es el más accesible. Encontrar el manga del One Piece no es fácil, y llevarlo al día, por lo tanto, tampoco. Sin embargo sí que hay medios suficientes para ir siguiendo la historia en su versión animada.
Si disfrutas con esto, genial. Si no, genial también. Pero pido respeto para aquellos que leen las críticas y que no conocen la trama del manga o de lo que está por llegar. Igual que a vosotros nadie os ha fastidiado la historia, haced lo mismo con los demás.
Dicho esto, pasemos al capítulo en sí.
Una batalla campal… pero no como hasta ahora
Whole Cake Island es una saga que está demostrando que hemos llegado a un nivel que no es como los demás. Si hasta ahora el «jefe final» era un Shichibukai o alguien de un nivel similar (Crocodile, Enel, CP9, Moria, Dressrosa), ahora este nivel de poder se encuentra por debajo del de ese «jefe final».
Esto hace que el ejército de Big Mom esté lleno de poderosos usuarios de akuma no mi contra los que Luffy puede no tenerlas todas consigo. Recordad que One Piece nos ha mostrado varias veces que nuestros protagonistas tienen puntos débiles frente a los que son muy vulnerables. Por ejemplo, cuando Nami tuvo que salvar a Sanji en Ennies Lobby porque no podía pelear contra una mujer.
Muchos de los enemigos a los que se han enfrentado los Mugiwara en esta explanada son difíciles de combatir. Hemos visto poderes ilusorios, la crema ardiente, la fuerza bestial de algunas «quimeras» de este ejército. Posiblemente si Luffy tuviese una pelea uno contra habría podido ganar a la mayoría. Incluso con los ilusionistas. Pero juntarlos a todos, y en el estado en el que se encontraba, pues la verdad, esto era una tarea imposible.
Incluso con la ayuda inestimable de Nami, las cosas se han puesto realmente chungas para el capitán que lleva peleando sin parar mucho tiempo y que aún no se ha recuperado. Y esto nos ha llevado a una situación muy inusual en One Piece: la derrota del capitán.
Habremos visto muchas veces batallas campales (Ennies Lobby, Thriller Bark, la Gran Guerra), pero una en la que un solo miembro se enfrentase a tantas akuma no mi, nunca. Pero esperábamos algún tipo de ayuda. ¿Chopper quizás? Y al final, no ha llegado
La derrota de Luffy
Si hay algo que One Piece sabe hacer es mantener las escalas de poder y la lógica entre ellas. Luffy las ha pasado canutas con enemigos contra los que era claramente inferior. Crocodile y Smoker fueron los primeros ejemplos. Ahí no tenía nada que hacer sin haki, y contra el primero sacó un truquillo y contra el segundo fue salvado por su padre.
Tampoco es especialmente bueno contra usuarios de espadas. Esos siempre se los acaba dejando a Zoro. Él es bueno contra los que disparan, los contundentes o peña como Enel, cuyo poder es completamente ineficaz contra la goma.
Por eso hemos visto a Luffy caer varias veces a lo largo de la historia. Crocodile y Smoker son dos ejemplos claros. Pero también cayó contra Aokiji, contra Kizaru y Sentomaru, contra Magellan… Lo que pasa es que en esos momentos tuvo la suerte de tener ayuda. En el primero fue el propio Aokiji el que se marchó, en el segundo fue Kuma quien les ayudó y en el tercero tuvieron a Ivankov.
Pero esta ocasión es distinta. Luffy se ha enfrentado a un ejército de una Yonkou solo con Nami. Y además tocado. Lo único que le ha salvado, por ahora, es que Big Mom los quiere con vida. Pero ¿gracias a la promesa de Sanji o a sus propios intereses? Ahora mismo tengo bastantes dudas respecto a esto. Pero quién sabe. Igual Big Mom sí que está loca por comer ese pastel de bodas.
La cosa es que, con Sanji derrotado y asumiendo que se va a casar con Pudding y en medio de la fortaleza de la Yonkou ¿qué le queda a Luffy para escapar ahora? Viendo las imágenes del avance ¿no os recuerda esta escena a la de Arabasta cuando cayeron todos presos y les rescató Sanji? ¿Recuperará el sentido común o conseguirá quitarse las esposas de alguna forma?
La trama avanza, por fin
Pero parece que hay algo bueno en medio de todo este caos. Dejar a Luffy encerrado en una prisión con Nami va a dar tiempo al anime a centrarse, por fin, en otros derroteros de la trama. Sobre todo en la parte de Brook y Pedro, que están completamente olvidados desde hace semanas. Y ellos se han infiltrado en la fortaleza de Big Mom.
Sí, vale, parece que el espectáculo de Luffy fuera del Whole Cake Chateau les ha venido de perlas para poder pasar más desapercibidos. Pero… ¿qué van a hacer ahora dentro? Y lo más complicado ¿cómo van a salir CON LUFFY?
La otra parte de la historia que nos tiene ya hasta las narices es la de Chopper y Carrot. Estos dos llevan huyendo toda la puñetera noche y no hay forma de que peleen. Y ahora que lo hacen, nos cortan las escenas cada tres segundos y medio. A ver si en el capítulo que viene vemos ya qué pasa con ellos, porque le estoy cogiendo una tirria a Brulee que no puedo con ella.
Ya va siendo hora de que la trama avance y nos deje ver un poco más de todo lo que pasa. Que no solamente es Luffy. Os recuerdo que esto es una misión de infiltración. No de meter leches. Aunque eso de infiltrarse y pasar desapercibidos ha quedado… en el olvido.