Omega Labyrinth Z ha sido prohibido en varios países por sexualizar menores. Entre los minijuegos que tiene se incluye el de desnudar chiquillas.
Omega Labyrinth Z es la secuela directa de Omega Labyrinth, un JRPG para PSVita y PS4. En este juego aparentemente inofensivo hay varios minijuegos un tanto peculiares. En estos minijuegos hay tareas tales como desvestir a los personajes mujeres, tocarlas o excitarlas sexualmente. Por este motivo Omega Labyrinth Z ha sido prohibido en varios países por sexualizar menores.
Algunos pensaréis que bueno, es un juego y que evidentemente es ficción y no pasa nada. Pues bien, éste tipo de productos culturales que banalizan este tipo de prácticas son las que luego nos llevan a comportamientos como éstos.
Y es que ese es el gran problema de la industria, que no se da cuenta de la repercusión que tiene. Es inevitable vernos influidos por la cultura que consumimos. Y eso no es malo. La cosa es que hay que ser conscientes de qué tipos de productos estamos consumiendo y qué ideas nos están lanzando a la cara. Y Japón, por desgracia, nos lanza ideas especialmente machistas y pedófilas.
Aunque no se especifica la edad de las protagonistas, el juego se refiere a ellas como chicas muy jóvenes. Ésto sumado a que las voces son de crías y a las prácticas ya mencionadas antes ha hecho que en Estados Unidos se espere una calificación de +17.
Mientras tanto en Reino Unido, Irlanda, Alemania, Australia y Nueva Zelanda el juego directamente se ha prohibido por pedofilia. Tampoco estará disponible en la tienda online de PS4. Éste es el primer juego que se prohíbe en Reino Unido desde 2008 cuando pasó lo mismo con Manhunt 2.
Todos deberíamos reflexionar un poco sobre cómo es la cultura que consumimos. Cuánto más se venda un producto, más se va a seguir su fórmula. Y, nosotros al menos, no queremos este tipo de cosas en la industria.