El drift de los Joy-Cons ha sido el principal quebradero de cabeza de Nintendo desde el lanzamiento de Switch, y un trabajador pone cifras reales al problema.
El lanzamiento y, en general, la vida de Nintendo Switch, se ha visto enturbiada por una movida: el drift de los Joy-Con. Ya sabéis, ese problema que hace que el joystick se mueva sin que realmente nadie lo esté moviendo. De hecho, vuelve a ser noticia porque PlayStation 5 y Steam Deck ya han reportado algunos problemas relacionados. El caso: un trabajador de Nintendo ha revelado que les llegaban «miles de Joy-Cons» a la semana para su reparación. Impresionante.
La empresa United Radio fue la encargada de la reparación de los mandos defectuosos y la fuente contactada por Kotaku es un trabajador de allí. Un representante ha indicado la cantidad de controles que recibían a la semana, y ha detallado: «Tuvimos que crear una sección nueva y entera dedicada exclusivamente a la reparación de los Joy-Con«.
Nintendo comenzó solventando el problema reemplazando los que estaban reparados por nuevos. El objetivo no era otro que aliviar la presión inicial y ofrecer soluciones rápidas. Pero ante la masiva aparición de problemas, se decidieron a arreglarlos. Así, Nintendo exigía a United Radio que el 90% de los mandos entrantes fuesen arreglados en un plazo máximo de cuatro días, tal y como recoge Kotaku en su investigación.
Este flujo de trabajo impedía llevar las tareas de una forma adecuada y los trabajadores se veían saturados con el problema. Había otro problema: muchos de los trabajadores de United Radio eran temporales e inmigrantes vietnamitas, lo que dificultaba la comunicación al no tener el inglés como idioma nativo. Kotaku calcula que dos tercios de los reparadores eran naturales de Vietnam, hecho que no ayudaba en la celeridad del proceso.
Como veis, el problema de los Joy-Con es uno que sigue coleando incluso en pleno 2022.