No Man’s Sky es el lanzamiento estrella de agosto y, casi casi, del verano. Hello Games, con Sean Murray a la cabeza, han conseguido ponerse en primera página de multitud de publicaciones desde que el juego viera la luz hace apenas unos días. Para algunos es una decepción sonada, mientras que para otros ha cumplido sobradamente las expectativas. Sea como sea, ya son muchos los que recorren este infinito universo en el que se descubren nuevas cosas a velocidad de vértigo.
No sé si será por la prisa que se están dando los jugadores en encontrar planetas y habitantes o porque nunca está de más echarse alguna que otra moneda al bolsillo, Sean Murray está empezando a replantearse lo de las actualizaciones gratuitas para siempre. Dice que quizás fue demasiado ingenuo al afirmar que no quería para No Man’s Sky otra cosa que no fuera añadir contenido sin cargo.
La promesa, o parte de ella, fue que el juego iría recibiendo más y más cosas con la intención de que un buen número de jugadores dedicara entre 300 y 400 horas a No Man’s Sky durante los próximos años. Realmente el tamaño del juego ya lo permite, pero la gracia está en motivar al jugador de manera periódica para que no le parezca algo repetitivo y lo deje a un lado para dedicarse a otros títulos más recientes. Según le iban tirando de la lengua al respecto, dejó caer sutilmente que la próxima actualización podría incluir la posibilidad de crear bases propias y poseer grandes cargueros espaciales.
Pero al preguntarle si este tipo de añadidos iban a ser de verdad siempre gratuitos, Murray no pudo descartarlo tajantemente y reconoció que cabe la posibilidad que alguno de los contenidos o características que planeen implementar en un futuro no entren dentro del presupuesto del estudio y se vean forzados a cobrar por ellos. ¿Quiere decir eso que, a pesar del tamaño del juego, aún pueden tener (o tienen) alguna manera de hacerlo más grande? Siempre acabamos pensando mal, pero ¿dejan la puerta abierta a nuevas ideas o son «cosas» descartadas que acabaran viendo la luz?