Netflix idea una nueva forma de fastidiar a sus usuarios. Ahora quiere que las cuentas compartidas abonen un extra por ver sus películas y series.
A ninguna plataforma de vídeo bajo demanda le gusta que sus usuarios compartan su suscripción. La gran mayoría lo ven como un mal menor. Salvo Netflix. El servicio más caro de todos ha ideado un nuevo plan para que sus usuarios con cuentas compartidas tengan que ver toda su roña pagando más.
Netflix hace tiempo que eligió el camino de la cantidad en lugar de la calidad. Hay muy buenos productos en la plataforma, pero cada vez son más difíciles de encontrar cuando nos ponemos a buscar. El catálogo está lleno de producciones mediocres mientras que el diamante en bruto acaba escondido.
A pesar de ello, a Netflix no le importa ser el servicio más caro. Se acoge a lo ya mencionado: una enorme cantidad de películas y series que jamás veremos —la broza infinita—. Y en lugar de pensar que tiene un gran número de suscriptores que apenas usan la plataforma —a la espera de algo en condiciones para ver—, prefiere poner trabas absurdas a los que comparten la contraseña.
La nueva y genial idea es la de cobrar a los que comparten su cuenta con un extra. Una cuota más barata que las oficiales —gracias, Netflix—, pero un importe más a pagar. De momento, esta nueva suma se cobrará en Chile, Costa Rica y Perú, cuyos usuarios podrán añadir a la cuenta primaria dos secundarias.
Cada una de las cuentas secundarias tendrá su propio correo electrónico y se cobrará un extra de 2,7 euros —al cambio— en Chile, donde ya pagan entre 6,75 euros y 12,16 euros, según el plan contratado. En Perú, el extra se cobrará a 1,9 euros. Mientras que en Costa Rica el importe asciende a 2,99 dólares, donde pagan entre 8,99 y 15,99 dólares por el servicio.
Esta nueva subida encubierta en forma de llantos por el ‘tráfico’ de contraseñas no tiene, de momento, fecha en otros territorios. Es probable que llegue viendo cómo están las cosas. Netflix parece más dispuesta a perder usuarios con precios excesivos a ganarlos con producciones de calidad. Con esta política es muy sencillo mirar a su competencia y sonreír ante la idea de abandonarlos. Así no cobrarán el extra ni la suscripción normal.
Fuente: Variety.