Jonathan Morin entra a formar parte de NetEase Montréal y creará una nueva IP.
En el año 2014, Ubisoft publicó un videojuego que arrastraba mucha expectación y que acabó quedándose en un quiero y no puedo de campeonato. Mítico es ya el famoso término «downgrade» que se acuñó, principalmente, por este título. Watch Dogs prometía demasiado pero no cuajó ante los fans en gran parte por las falsas promesas que profesaba. El caso: resulta que su director creativo, la mente detrás de la idea -de la idea del juego, no de las verdades a medias-, Jonathan Morin, se ha pasado a NetEase Montréal para crear una nueva IP.
En un comunicado, del cual nos hacemos eco a través de VGC, el creativo ha aseverado:
Estoy emocionado de anunciar mi nueva aventura como Director Creativo en NetEase Montréal. Soy un privilegiado de unirme a un equipo apasionado y talentoso, cuyo objetivo no es otro que crear una IP propia. Esto es solo el principio de algo especial para mí y no puedo esperar a contar más.
Fuga de talentos
NetEase cuenta con el «honor» de arrastrar un montón de talento procedente de otros equipos. La compañía china, que está dispuesta a dominar el mercado de los videojuegos, cuenta en sus filas con Emile Liang, un veterano también de Ubisoft que trabajó en las franquicias de Assassin’s Creed y Far Cry.
También han tanteado talento en Asia. Hiroyubi Kobayashi comenzó como programador de la serie Resident Evil para ejercer luego como productor en Dino Crisis. Pues también este se fue de su empresa, Capcom, para acudir al gigante chino.
Finalmente, notable fue también la adquisición de Grasshopper Manufacture. Con Suda51 al mando y con No More Heroes como principal exponente, el estudio es ahora, también, parte de NetEase. ¡Ah! Y en esta pesca de estudios no podemos dejarnos a Quantic Dream, el de David Cage. Han llegado para quedarse y no parecen querer parar.