Si crees que los aliens son una amenaza, vas a flipar. Resulta que la propia nave Talos I de Prey es puñetera como ella sola. Ten cuidado con dónde te metes.
Si por algo reconocemos a Arkane Studios es por su diseño de niveles y vida de escenarios. Prueba de ello son las continuas menciones a Dunwall y Karnaca que se han realizado en sendos análisis de Dishonored y Dishonored 2, respectivamente. La nueva obra del estudio también contará con un escenario vivo, único e irrepetible. ¿No te lo crees? Pues míralo por ti mismo en este pequeño paseo por la nave Talos I de Prey.
Varios miembros del equipo nos hablan acerca de los peligros de la nave, y se extraen jugosas declaraciones. Uno de ellos es Seth Shain, diseñador de sistemas:
En la nave Talos I de Prey hay zonas con gravedad 0. También hay zonas donde no se puede respirar, o que están repletas de amenazas. Los aliens son sólo un peligro para el jugador; la nave lo es también.
Por tanto, y como bien comentan los propios desarrolladores, la nave va a ser peligrosa por ella misma. Pero Ricardo Bare, diseñador líder, también aporta una visión interesante acerca de la localización de juego:
No es sólo la chapa reluciente de la nave. La estación está construida en capas, fases, como una cebolla. Cuanto más cerca te aproximes al núcleo, más te acercarás a la razón por la que la nave está así […] Nosotros denominamos a Prey como un juego de estación abierta. Es como un juego de mundo abierto. Eventualmente, el jugador tiene las herramientas para explorar la nave por su cuenta. Puedes ir fuera, volar por el espacio sin restricciones y acudir a zonas nuevas o ya vistas.
Esto nos cuentan los chicos de Arkane sobre la nave Talos I de Prey. El hecho de que tenga «vida propia» lo convierte en un escenario peligroso, interesante y muy llamativo. El próximo 5 de mayo podremos deambular por la nave… ¿Te apuntas, culpable?