Una linterna. Alguien que se deja llevar por un engaño. La cinemática Nadie Escapa de Legends of Runeterra nos muestra el lado perverso del juego.
League of Legends tiene un lore la mar de interesante que, por desgracia, no se toca mucho en el juego principal. Por suerte, desde que se anunciaron los distintos títulos basados en su universo, este se está haciendo cada vez más y más accesible. Donde más vemos esto es, curiosamente, en su juego de carta. Cada región, con sus propios mazos y jugadas, muestran un poco más de lo que esconde Runeterra. Sin embargo, somos realistas: con eso no basta. Es por ello por lo que disfrutamos como nada con cosas como Nadie Escapa de Legends of Runeterra.
A ver, no, no os vamos a decir que el juego enganche lo que no está escrito (que también). Hablamos de las cinemáticas dedicadas al juego que está compartiendo Riot Games. Ya vimos la dedicada a Demacia, o la que nos mostró el tierno corazón helado de Braum. Pero como no todo es bueno en el mundo, esta última nos ha mostrado la parte perversa: las Islas de la Sombra, cuyo protagonista principal es, ni más ni menos, que el señor del gancho, el carcelero de almas Thresh.
Realmente, tras ver esto sólo podemos decir que el muchacho ha cometido todos los errores que se comenten en las películas de terror, por lo que el desenlace estaba más que cantado. ¿Cuál será la siguiente región que muestren? Yo sigo abogando por Noxus, está claro que el mundo necesita más Draven que nunca. Porque nunca tenemos suficiente de Draaaaven.