Estoy nostálgico y últimamente, aparte de jugar como un loco a Skyrim, estoy recordando juegos que salieron en los primeros años de PlayStation 3 en Europa allá por el 2008. Recuerdo como deseaba, ansiaba ese Metal Gear Solid 4 que supuestamente tendría que cerrar la saga definitivamente y que por una huelga de camioneros y transportistas tuve que esperar una semana porque no llegó al GAME. Aún tengo las manotadas en el techo ya que durante toda la semana me subía constantemente por todas las paredes de mi casa intentando no ser spoileado vilmente por una mente perturbada y maléfica de esas que hay por ahí sueltas en redes sociales como Twitter y, en menor medida, Facebook.
Por fin llegó. Me lo pasé, aluciné y me vicié a más no poder a ‘Metal Gear Online‘ con mi personaje. Después vinieron los DLC que aumentaban el número de escenarios, skins y personajes jugables pero quien me conoce sabe que paso olímpicamente de todo contenido descargable a no ser que sea totalmente gratuito.
Hoy he vuelto a poner el BluRay de ‘Metal Gear Solid 4‘ dentro de mi PlayStation 3 y he «disfrutado» como un enano de la aventura de Solid Snake y sus compañeros. Estoy pasando rápidamente las cinemáticas ya que además de que son muchas es que algunas de ellas son cansinas y todo el rato «Bla, bla, bla…». Solo dejo las cinemáticas de acción, sobretodo la lucha entre Raiden y Joaquín Cortés.
No me entretengo más y os dejo con lo poco que he podido jugar hasta que Anastasio me dijo: «Márcate una noticia o algo que esto está hoy muy soso». Pues ahí lo tenéis.