Crítica del manga de One Piece 925

Mientras Luffy sigue prisionero de Kaidou, el manga de One Piece 925 nos deja más de dos, tres y cuatro bombazos. Atentos que Oda está preparando desde ya el final del manga.

Parece mentira que a estas alturas de la vida hablemos del final de One Piece. Pero es que con lo que hemos visto en el manga de One Piece 925, la cosa se empieza a acercar a un nuevo clímax. Otro muy parecido al que vimos en la saga de la Gran Guerra.

Y al igual que en aquel entonces, el que mueve todo en las sombras (o el que está esperando pacientemente) es Kurohige. ¿Qué tiene planeado Oda para lo que llegue a partir de ahora en Wano?

El mundo sigue avanzando

No podemos olvidar que, desde el principio del manga, Oda ha dejado claro que estamos viviendo las aventuras de Luffy. Hemos conocido su historia y siempre hemos visto la parte en la que él estaba. El resto de situaciones en las que participaban otros protagonistas las hemos visto de refilón.

Hablamos, por ejemplo, de cuando la banda se separó por primera vez, en el Baratie. Nos quedamos con Luffy en su pelea contra Don Krieg y luego le acompañamos a Arlong Park. Pero la trama de Nami pasó a ser contada por encima.

Así han sido las cosas siempre que la banda se ha separado mucho tiempo. Cuando Kuma los mandó a tomar por saco a cada uno (Amazon Lily, Impel Down y la propia Gran Guerra). O más recientemente, desde que la banda se separó en Zou para ir a por Sanji y a Wano.

Pero que hayamos seguido a Luffy en su camino no significa que el mundo no haya continuado avanzando. Al igual que esto ha ocurrido con el protagonista, las cosas en el mundo se han ido moviento también. La trama de Ace hasta que cayó preso con Kurohige se fue contando poco a poco. O ahora, la del Reverie.

Por eso no sorprende, para nada, que el autor nos cuente cosas muy gordas de una forma tan escueta y casi sin darle importancia. No lo olvideis. La historia es la de Luffy. Pero para poder entender todo lo que le pasa a él, al menos hay que saber qué ocurre en el mundo.

El plan de Kurohige

Si hay alguien que apunta a ser el malo malísimo de toda la historia de One Piece (y por tanto de Luffy), ese es Kurohige. Ha sido el culpable de atrapar a Ace. Se metió en Impel Down y se hizo con lo más infame de la cárcel para su tripulación. Aprovechó la caída de Shirohige y le robó su poder con su extraña habilidad. Y por si fuera poco, asumió su puesto como Yonkou tras la caída del pirata.

Ahora, y tras huír de la batalla por no ser lo suficientemente fuerte, el pirata se vuelve a mostrar por fin, pero con muchos nuevos matices. Y no solo hablamos de su crecida barba.

El pirata continúa con su técnica de robarle habilidades a sus enemigos para dárselas a sus aliados. Y al parecer, ya no es el único que puede albergar dos poderes a la vez de las akuma no mi. Ahora dos de sus principales nakamas tienen dos importantes habilidades.

Shiryu, además de su habilidad inicial, tiene también la de la invisibilidad de Absalom. Y Devon la de los tanuki. Si esto es así, y siguiendo la lógica que hemos visto hasta ahora, significa que Absalom ha muerto…

 

No sabemos aún cómo lo hace puesto que, recordemos, una persona no puede comer dos Akuma no mi. Explota si hace eso. Pero es evidente que hay algo en la habilidad de Kurohige que sí le permite hacerlo.

Esto lo está convirtiendo en alguien muy peligroso. Tras la Gran Guerra, no se enfrentó a ninguno de los grandes piratas pues aún era muy débil. Resistente, pero débil. Sin embargo, lo que estamos viendo es que hay que temerle, y mucho ahora. Sobre todo de cara a cuál puede ser su plan final.

Parece que el Yonkou está esperando a que se produzca una nueva guerra. Una en la que la Armada Revolucionaria se enfrenta a La Marina y otra en la que los Yonkou se pegarán entre ellos. Kaidou, Luffy y Big Mom se van a encontrar pronto. Pero estoy seguro de que también llegará Shanks.

Reverie… ¡ay! Reverie

Si hay algo que ha impactado (además de las revelaciones de Moria y Kurohige) es que por fin ha estallado la guerra entre La Marina y la Armada Revolucionaria. El ejército de Dragon (el padre de Luffy) se ha expuesto finalmente a la luz y ha empezado sus movimientos para rescatar a Kuma. Algo muy parecido a lo que hizo Shirohige cuando fue a Marineford a rescatar a Ace.

Como dijimos antes, esto lo ha contado Oda de una forma muy superficial. Me recuerda, en parte, a cómo se contó en Shingeki no Kyojin quiénes eran el titán acorazado y el titán gigantesco. Así, como quien no quiere la cosa.

Pero por algo será. Se trata de una batalla de alto nivel donde van a haber hostias como panes. Y ya tenemos bastantes hostias en One Piece con Luffy como para meternos en una de este calibre.

Sinceramente, creo que con todo lo que está pasando, meternos de lleno en la guerra del Reverie sería un error. Cansaría demasiado. Sobre todo porque hay muchos personajes que no conocemos del todo o que no han sido excesivamente protagonistas. Evidentemente Dragon y Sabo sí que nos interesan. Pero el resto han pasado muy de tapadillo.

 

En ese sentido, mostrar la guerra en primera persona sería un error por parte de Oda. De esta forma, mantiene la tensión y puede hacer que destaquen algunos de los personajes que él quiere. Y no nos aburre con las pequeñas trifulcas.

Otra cosa será cuando los Mugiwara estén metidos dentro del meollo. Entonces sí que nos interesará ver cómo se desarrolla el asunto. Pero por el momento, ya tenemos bastante con intentar averiguar cómo narices van a salir de Wano de una pieza.

El acto dos de Wano

Y para terminar el capítulo, One Piece nos ha dejado un pequeño avance de lo que va a ser el segundo acto en Wano. Allí Luffy sigue estando preso de Kaidou y hemos visto por fin a sus torturadores. King y Queen.

La cosa es que, como esperábamos, no van a doblegar a Luffy tan fácilmente. Si no lo han conseguido con Kid, no lo lograrán con el capitán de los Mugiwara.

Por otro lado, se confirma que Tama está viva. Y me da a mi que la chica va a tener algo importante que ver en todo el futuro de la saga. Al igual que el samurái al que intenta reclutar Kinemon.

Son pequeños detalles de lo que nos espera en el futuro. Un futuro que, por supuesto, va a ser muy pero que muy largo.

Pero, por favor. Que reúna ya a la banda al completo. Que quiero verlos pelear a todos juntos de una vez por todas. Y es que, al igual que pasó con Oz, dudo mucho que Kaidou caiga en un enfrentamiento uno a uno con Luffy. Al menos sin un hipotétito gear fifth. Pero de eso hablaremos en otro capítulo.