Volvemos con el manga de Eden’s Zero 03. En esta ocasión, Mashima nos explica más cositas de este universo y juguetea con intentar diferenciarlo de Fairy Tail.
Hiro Mashima continúa con el ritmo acelerado que lleva su nueva historia. En el manga de Eden’s Zero 03 volvemos a encontrarnos con un capítulo extralargo que sirve para seguir introduciéndonos en este universo. Pero también intenta, de forma un poco tosca, diferenciarlo de Fairy Tail.
En su línea, el mangaka sigue exponiendo ideas y misterios que rodean al Cosmos. Y de paso nos da un objetivo claro… aunque un poco infantil.
Madre
La semana pasada vimos a un personaje un tanto raro. Se trataba de una mujer (enorme) que sabe cosas de Shiki. Algo así como una especie de diosa o de creadora.
Pues bien, el menga de Eden’s Zero 03 ha mostrado quién es ella. O al menos cómo circulan las leyendas sobre ella en este loco mundo. Se trata de Madre, una especie de todopoderosa señorita que está ahí en medio del espacio vete tú a saber por qué.
Lo gracioso es que justifican su existencia diciendo que un aventurero dice que la vio. Pero cuando Shiki dice que la recuerda nadie le cree. ¡Eso es doble rasero!
Sea como sea, es evidente que Shiki tiene algo que ver con ella. No sabemos qué y, posiblemente, sea uno de los grandes misterios de Eden’s Zero. A ver si es verdad y nos da una grata sorpresa.
Amigos o enemigos
Si la semana pasada apareció la clon malvada de Erza, esta hemos visto un poco más de ella. No ha sido demasiado. Lo suficiente como para saber que busca a Shiki por algo pero no para desvelar si es buena o mala. Y también la llaman «princesa». ¿Princesa por título o por apelativo cariñoso?
Es evidente que Mashima quiere mantener el aire de enemigo sobre esta capitana de los piratas. Pero puede que nos encontremos más con una aliada que con otra cosa. Es un poco típico tópico. Vaya, que cuando soy master de las partidas de rol siempre cae algún personaje así. Son los más molones.
La cosa es ahora preguntarse por qué busca a Shiki y qué sabe de él exactamente. Habrá que ver si en el planeta muerto al que van tienen el encontronazo o acaban dejándolo para otra saga.
Eden’s Zero vs Fairy Tail
Es evidente que los dos mangas tienen sus diferencias. Pero también es muy obvio que los diseños de los personajes son parecidos entre ellos. Además, como os hemos comentado en otras ocasiones, el manga de Mashima tiene todos los tópicos de sus historias. Quizás por eso este capítulo ha ido enfocado, en parte, a mostrar las diferencias entre uno y otro.
Para empezar, ha dejado bien claro que el gremio de Aventureros no es Fairy Tail. Si en uno primaba la hermandad y el compadreo, aquí más bien es lo contrario. Algo más parecido a la bolsa de cualquier país.
También nos ha mostrado algún que otro antagonista. Aunque sea un poco infantiloide. Se trata de la idol que se parece mucho a la Wendy de Fairy Tail. Y que, todo sea dicho, es un poco más petarda.
También sigue mostrando todo el tema del cosmos y sus entresijos. Madre, de la que hemos hablado, no tiene casi ninguna referencia a lo que hay en sus mangas anteriores (menos mal). Tampoco se ven dragones ni nada por el estilo (todavía).
Lo que si que hace es un par de reseñar y guiños directos a Fairy Tail. Y de hecho, hasta nos deja ver a Natsu y Lucy. Quizás para decirnos que no son tan parecidos a Shiki y Rebecca como nos pensamos. Pero yo lo sigo pensando.
Un poco de interés
He de reconocer que Hiro Mashima sabe presentar más o menos bien las cosas. En tres capítulos nos ha mostrado un universo nuevo, unos misterios interesantes y bastantes promesas.
Esto contrasta con su idea de epicidad y de repetir una y otra vez los conceptos de la amistad, el colegueo y el sacrificio por los amigos. Así que podríamos decir que una de helado y otra de coliflor hervida (lo de cal y arena nunca me gustó).
Un poco de interés sí que tengo. Pero viendo el final de Fairy Tail, me da miedo que alargue el chicle demasiado. Aún así, démosle tiempo. A ver por dónde sale y a qué confines nos lleva. Pero sobre todo, por favor, más estrategia y menos «por mis santos cojones que te venzo». Que ya estamos hartos de eso.