Maldita Castilla Ex ha dado el salto del PC a la Xbox One. Para esta entrega, Locomalito y Gryzor 87, junto con Abylight Studios, han incluido una serie de añadidos, como dos niveles enteros nuevos, pero han dejado intacta la dificultad y un estilo que nos golpeará directamente en los recuerdos.
Maldita Castilla Ex nos pone en la piel de un Don Ramiro en cuyo su periplo se verá acompañado en ciertas ocasiones por Quesada, Mendoza y Don Diego, con los que deberá liberar las tierras de Tolomera, por orden directa del rey Alfonso VI.
El juego no tarda en mandarnos al campo de batalla, donde debemos enfrentarnos a una serie de enemigos y jefes finales. En total hay 48 tipos de rivales a los que debemos ajusticiar a lo largo de 8 variados escenarios, utilizando todas las armas que vayamos encontrando por el camino. Para tener un razonamiento tan simple, el juego es tremendamente variado en su ejecución, pues tan pronto estamos batallando en un carro como escalando una montaña o tratando de sobrevivir en plena oscuridad.
Maldita Castilla Ex es un juego muy complicado, sobre todo cuando nos acercamos al final, pero no es tramposo, ya que cada vez que caigamos y debamos repetir el escenario, sabremos que ha sido culpa de nuestra falta de pericia con el mando. El juego nos da la posibilidad de continuar cuantas veces queramos, pero ello repercute en la puntuación final reflejada en el marcador. El juego es purista hasta para eso. La duración de Maldita Castilla Ex es escasa, pero debido a la dificultad, solventar cada nivel nos exigirá más de una hora. Posteriormente podemos volver para mejorar la puntuación, influyendo así en la rejugabilidad.
El manejo de Don Ramiro es tosco y hay que planificar bien cada salto, ya que no será raro que nos obedezca tarde y acabemos cayendo al vacío. En lo que se refiere al combate, Ramiro solventa todos los problemas con dos botones, por lo que su control es tan simple como efectivo.
Los enemigos son un mero estorbo a los que no nos costará finiquitar, salvo cuando se acumulen en pantalla y debamos actuar con inteligencia y orden. Los jefes finales son otro cantar debido a su elevada dificultad y aunque conozcamos su punto débil, será difícil atacar, debiendo seguir un ritmo casi milimétrico para poder continuar.
Los gráficos y el sonido han sido retocados para ofrecer una experiencia todavía mejor que la versión en PC. Gráficamente es fiel a la época en la que se basa, con escenarios variados y vistosos. Incluye la posibilidad de darle diferentes estilos gráficos, no solamente el que vimos en el juego gratuito de PC, incluyendo pantallas adaptadas a las panorámicas y resoluciones al gusto.
Musicalmente es una delicia que nos transporta a nuestra infancia (si ya tienes una edad), aunque ha mejorado notablemente con respecto al original, pasando del mono al estéreo de una forma magistral.
Maldita Castilla Ex es una experiencia con claro aroma a Ghost’n Goblins, pero eso no lo hace un mal juego. Es divertido, variado, exigente y harto difícil, sin caer en la injusticia. Con un precio de salida de apenas 12€, satisfará a aquellos que quieren retroceder un par de décadas. Un gran trabajo.