Después de muchas películas, series, spin off y tráilers de por medio, por fin ha llegado a las pantallas Los Vengadores 2: La Era de Ultrón. Los muchachotes más fuertotes de La Tierra se vuelven a reunir para combatir contra una poderosa amenaza, aunque esta vez, son ellos mismos los que la han creado. Y este será el «spoiler» más grande que verás en esta crítica, culpable. Así que lee sin miedo.
Dejando precedentes a parte (aquí puedes echarles un vistazo a todas las películas y el argumento) y para no liarla más, podemos decir, en términos generales, que la película, pese a continuar con los acontecimientos que vimos en Capitán América 2: El Soldado de Invierno, sí que puede dejar un poco descolgada a la gente al comienzo, ya que después de tener a cada vengador por ahí desperdigado, de pronto los encontramos todos juntos y luchando al unísono contra Hydra para recuperar el báculo que Loki usó en su invasión a La Tierra en 2012.
La primera pregunta que se nos pasa por la cabeza es, si SHIELD estaba completamente desmantelada, ¿cómo se han organizado de nuevo Los Vengadores? Sin Furia al frente y con un Coulson que ni se huele en la película, este inicio es chocante, pese a que luego intentan explicarnos que América y Tony son, por así decirlo, los nuevos líderes de la iniciativa. Dejando eso de lado, el resto de la película queda bastante bien hilado, sobre todo si sigues la serie de Agentes de SHIELD, de la ABC.
Centrándonos en la película, he de decir que, bajo mi punto de vista, hay dos puntos muy importantes a destacar. El primero es cómo Joss Whedon consigue, una vez más, crear un grupo de luchadores que funcionan cada uno por su parte, y a la vez, en equipo. Y vuelve a lograrlo genialmente gracias a que cada uno de ellos tiene un estilo completamente diferente al de los demás.
Eso sí, esta vez vamos a ver menos de cada uno para ver más de todos ya que, al aparecer nuevos elementos en escena, como Mercurio o la Bruja Escarlata, entre otros, el tiempo en el que se puede centrar en cada vengador es menor. Sin embargo para eso es esta película ¿no? Para verlos a todos, y no solo a uno de ellos.
Si esta es la gran luz de La Era de Ultrón, la gran sombra la lleva precisamente en su nombre, y es el enemigo que hace que tengan que emplearse a fondo. A diferencia de Loki, el primer villano al que tienen que enfrentarse todos unidos, Ultrón carece de carisma ninguno. No tiene trasfondo, no se comprenden bien sus motivaciones, y pese a que la película intenta mostrarlo, no alcanzas a ver su verdadero objetivo.
Ultrón nace de un experimento, y desarrolla su propia personalidad, sin embargo lo hace de una forma tan rápida y acelerada que es hasta forzada. El odio que desarrolla hacia Los Vengadores y su papel en la Tierra es algo que no vamos a entender en ningún momento más que por una simple frase, y las posibilidades que tiene su relación con Iron Man, al que supuestamente odia con más ganas, se ve totalmente desaprovechada.
Tampoco se aprovecha en ningún momento el carisma de los dos aumentados que aparecen en escena. Pietro y Wanda, los dos gemelos, dejan de ser X-Men en esta película para convertirse en experimentos de Hydra que desarrollan, por un lado, velocidad, y por otro, control telequinético y mental. Y ambos odian a Stark porque su familia murió por sus armas, cuando él aún se dedicaba a ese negocio. Nuevamente, este odio, este enfrentamiento, no queda nada claro, y pese a decirlo claramente en muchas ocasiones, nunca vamos a ver eso en combate. Nunca.
Lo que sí que veremos, sin lugar a duda, es la diferencia de parecer que tienen los dos grandes líderes del equipo. El Capitán América, por un lado, y Tony Star por otro. Si el primero es un paladín en toda regla, siguiendo todas las normas y queriendo hacer el bien, Iron Man se decanta más por la guerra preventiva, lo que ocasiona el desastre de Ultrón. Esto, sumado a los acontecimiento de Agentes de Shield, nos va dando ya una idea de por dónde van a ir los tiros en el arco de La Guerra Civil que se estrenará el próximo año.
En cuanto al resto de la película podemos decir que la trama sorprende, sin que sea demasiado original, que los efectos especiales son brutales y que todos los vengadores tienen su momento de gloria en su lucha contra Ultrón y sus aliados. La aparición de nuevos vengadores, sin entrar a dar más spoilers, le va a dar ese toque épico que sobrepasa lo épico de la primera y pese a que el cambio en algunos de los protagonistas no termina de cuajar, cuando lo han hecho, ganan muchos enteros. El ritmo, quitando la primera parte que queda con muchos vacíos de trama, es bastante correcto y no se hace ni demasiado frenética ni demasiado corta y el punto de humor es igual o mejor que en la primera película. Atentos a la cara de Thor con su martillo. Atentos.
Un punto que pasaba bastante desapercibido en esta ocasión es la banda sonora. Si bien volveremos a reconocer los temas típicos de Los Vengadores, no hay nada que nos vaya a sorprender en esta ocasión. En absoluto es mala, pero simplemente acompaña y no desentona, que ya es mucho.
También veremos algo que llevamos esperando mucho tiempo y es, por supuesto, la mención expresa nuevamente a las Gemas del Infinito, esta vez, por parte de Thor, que se dará cuenta de lo poco casual que es que aparezcan varias de estas fuentes de energía inconmensurables en tan poco tiempo. Siguen sin explicarnos qué son y por qué las quiere Thanos, que también tiene su momento de gloria en la película, y si no habéis visto todas las películas con detenimiento, seguramente hayáis pasado por alto alguna de las cuatro que ya han aparecido.
Supongo que tenemos que darnos con un canto en los dientes de que ya estén hablando claramente de ellas, sin embargo esto implica un riesgo muy grande ya que nos están presentando a un villano que sobrepasa, y con creces, a todo lo visto hasta el momento. Ni Loki, ni Ultrón, ni Cráneo Rojo, ni Ronan, le llegan a la suela de los zapatos a Thanos. Éste ser que, con apenas cinco minutos de aparición en todo el conjunto de las películas de Marvel, está tomando un carisma impresionante, muy al estilo de Freezer en Dragon Ball.
Un ser tan poderoso y tan intocable es el que va a darle ése toque a la Guerra del Infinito que le falta a la Era de Ultrón. Un villano carismático. Un enemigo al que temer, al que comprender, con el que empatizar. Éste es el gran fallo de la segunda película de Los Vengadores. Le falta profundizar más en Ultrón, le faltan minutos a su relación con Iron Man, le falta historia a Mercurio y Escarlata… le faltan los malos. Ser poderoso no lo es todo, también tienes que llegar a la gente.
Ya sabemos que cuando la película salga en Blu-Ray, veremos una versión extendida de la misma y con un final alternativo, por lo que esperamos que estos minutos extras, que son aproximadamente una media hora más, le den ese toque que ahora mismo le falta a Los Vengadores 2: La Era de Ultrón. Sin embargo, y pese a este fallo que la pone un poco por debajo de la primera película, lleva a los héroes del universo Marvel a unas cotas de espectacularidad y epicidad que van a poner el listón muy alto. Pero seguro que Thanos puede con ello.
https://youtu.be/ldQy1lv3sHU