Habéis leído bien, los míticos Oliver y Benji volverán a las pantallas en 2018. La famosísima serie de niños futbolistas volverá para el próximo Mundial de Fútbol, celebrado en Rusia el año en que planea relanzarse el anime, es decir, 2018. Y no, no es una amenaza. Aunque parecía que habíamos dejado atrás los estadios de fútbol kilométricos lo cierto es que van a volver. Los regates ortopédicos y los tiros a puerta imposibles eran cosa del pasado. Hasta ahora.
Conocida realmente como Captain Tsubasa en Japón y en casi todo el mundo salvo España-ya que una clásica maniobra española es tomar por limitado al público y huir de lenguas extranjeras, no sea que se líen- , el anime gozó de una gran popularidad entre los 80 y los 90 y gran parte de la culpa la tuvo el Club Megatrix y la repetición indiscriminada de episodios. Práctica habitual de aquella época oye. Si no he visto 15 veces la saga de los androides y Célula de Dragon Ball Z -a lo largo de varios veranos- el número andará por ahí, más o menos.
El caso es que con motivo del Mundial de Fútbol de Rusia de 2018 el anime volverá. Es un hecho comentado por el propio productor de la serie, Yoichi Takahashi. Se desconoce si será un anime cerrado o si está planeada su continuidad tras 2018. Oliver Atom, Mark Lenders, Ed Warner, Bruce Harper y todos esos nombres que tenemos almacenados en la memoria volverán para llenar un hueco que…¿ya está lleno? ¿Os suena Inazuma Eleven? Le va bastante bien. Con varias temporadas de anime y unos cuantos videojuegos que no dejan de aparecer cada varios meses.
No tengo muy claro si Captain Tsubasa -u Oliver y Benji, lo que más os guste- tiene intención de reinventarse, pero era un anime tirando a realista. Realista y, por momentos, aburrido y desesperante. Pero es lo que había. Era eso o la 2, tuvimos que elegir y lo hicimos, no juzguéis. A día de hoy Oliver y Benji es más conocida por ser objeto de memes y mofas. La inverosimilitud sobre la que esprintaban y regateaban sus jugadores en partidos de episodios y episodios -y episodios- le granjearon cierta fama cómica. Muy merecida, a decir verdad.
Personalmente espero que su regreso sea un retorno a lo clásico. Que se dejen de niños con armaduras de caballeros del zodiaco y entes extra dimensionales. Yo quiero que el balón sea mi amigo, quiero mis campos de 10 kilómetros y quiero, sobre todo, el drama social de Mark Lenders manteniendo a una familia de padre ausente.