No es que nos parezca bien que una panda de hackers interrumpa nuestro tiempo de ocio con los videojuegos con una tanda de ataques informáticos, pero esos hechos se quedan en nada si los comparamos con una amenaza de ataque terrorista, que es hasta donde ha llegado Lizard Squad, el grupo que se ha trincado PSN, Xbox LIVE y Battle.net durante el fin de semana.
Según podéis ver en la imagen, estos piratas han conseguido que el avión en el que viajaba John Smedley, presidente de SOE, se desviara de su trayectoria para comprobar si la amenaza de bomba que había recibido era cierta, o no. Afortunadamente todo ha quedado en un susto para el pasaje del avión, y el FBI ya ha tomado cartas en el asunto para averiguar lo más rápido posible quién está detrás del grupo.
Yes. My plane was diverted. Not going to discuss more than that. Justice will find these guys.
— John Smedley (@j_smedley) agosto 24, 2014
Si echáis un vistazo al perfil de Twitter del grupo hacker, se muestra afín a la causa del Estado Islámico, que está masacrando a la minoría cristiana en Irak, dejando un reguero de sangre y muerte a su paso.
Un ataque a las plataformas de juego online en domingo puede resultar hasta «entretenido» desde el punto de vista informativo, pero cuando se pone en juego la vida de la gente, se amenaza y se ponen encima de la mesa motivaciones que van más allá de «la búsqueda del bien de los jugadores», nosotros nos apeamos del burro. Que los cojan, y que los cojan lo más rápido posible.