Si hay alguien que espera que Metal Gear Solid V: The Phantom Pain se convierta en un pseudo-sandbox, que se quede tranquilo (o desconsolado, si es lo que querría), porque Kojima deja claro que no, que una cosa es un mundo abierto, al cual los fans de la saga no están acostumbrados, y otra cosa muy distinta es poder hacer diez mil tonterías mientras nos desviamos de la trama principal:
El mapa es un mundo abierto, y tienes libertad en ese sentido, pero en MGS V siempre tienes claro lo que tienes que hacer. Eso puede ser «Tengo que ayudar a alguien» o «Tengo que destruir esto«, o lo que sea… pero todas las misiones tienen límites. Creo que el término «mundo abierto» ha llevado siempre a muchos malentendidos. Evidentemente, no estamos hablando de un juego en el que Snake pueda pescar, trabajar, o llevar una vida diferente.
Desde el principio hasta ahora, solo podíamos construir el interior del lugar en el que ibas a infiltrarte, y a través de una escena, mostrar cómo Snake entraba en ese edificio en cuestión, y una vez terminada esa misión, aparecía otra escena, un helicóptero, o lo que fuera, y ya está. No es que ese tipo de linealidad esté mal, pero siempre creímos que sería genial que sea el jugador el que piense y decida cómo y por dónde se va a infiltrar, y el equipo que llevará. Creo que el futuro de los videojuegos reside en los mundos abiertos.
Sabemos tanto y a la vez tan poco de Metal Gear Solid V: The Phantom Pain… Bueno, yo sé algo que el resto no, y es que será el GOTY 2014, pero tranquilos, lo comprobaréis a su momento, cuando llegue el año que viene a PlayStation 3, Xbox One, PC, PlayStation 4 y Xbox One.
Vía Polygon