Juego de Tronos 6×04 El libro del desconocido – Crítica

La temporada continúa avanzando a pasos agigantados y este Juego de Tronos 6×04 le pega un empujón a algunas de las tramas paralelas de una forma bastante rápida… incluso a veces hasta precipitada y poco refinada. Quizás se acabó el tiempo de la diplomacia y va llegando la hora de pasar a la acción, aunque no a todos nos convenza.

Este capítulo destaca por varios aspectos, pero principalmente lo hace por convertirse en el que más patente deja que ha cambiado algo. Que esas magníficas conversaciones entre Cersei y Margaery, entre Olenna y Tywin Lannister o entre Varys y Meñique no van a volver. Las miradas, las segundas, terceras y cuartas lecturas, los labios fruncidos… todo eso parece que pasa a la historia ya que solo hemos visto un pequeño atisbo de estas actuaciones en todo el capítulo, y ha quedado más descarado que un manchurrón de tinta en tu camisa blanca.

Hablo de la estratagema del Gorrión Supremo para hacer caer a Margaery y Loras Tyrell, intentando hacer de chico bueno, contando sus pecados y dejando que la reina se reúna con su hermano. Al principio puedes pensar que es majo, que se le ablanda el corazón o incluso que quiere hacer caer a Loras viendo a su hermana, pero nada más lejos de la verdad. A la que quiere derrotar es a la propia Margaery.

Como digo, algo un poco enrevesado pero muy lejano a las artimañas de Cersei (mal hechas), Tywin, Olenna o Varys.

Y esto se ha constatado en varios momentos, como en la irrupción de Cersei y Jaime en el consejo privado con una Reina de Espinas que es la que más pierde. Quizás quieran mostrarnos la desesperación de una abuela por salvar a su nieta de lo que puede ocurrir si cae bajo el influjo del Gorrión Supremo, pero que dista mucho de esa mujer que puso en jaque al propio Tywin y que urdió la muerte de Jeoffrey sin pestañear si quiera.

Kevan no es más que un mero títere para la serie, que hace de tipo duro pero que ni si quiera tiene papel en los libros, donde murió a manos del propio Varys. Eso le deja como un personaje muy pero que muy vacío y que simplemente sirve para no dejar a un consejo del rey con solo Olenna y Pycelle. Por no hablar de Jaime, un personaje muy cambiado y que ahora mismo tendría que estar redimiéndose de su pasado y buscando a Sansa con Brienne, lo que explica también que ande bastante a la deriva y nos parezca que no encuentra su sitio.

Como resultado de todos estos elementos, la escena resulta casi ridícula, carente de elegancia y muy por debajo de lo que hemos visto hasta ahora. Sí, puede que algunas actuaciones tengan sentido, pero es que Olenna es mucha Olenna… o lo era. Al menos, en defensa de este momento diré que se prepara una buena, y nos mete algo de expectación con lo que puede pasar en un Desembarco del Rey venido cada vez a menos.

Por suerte para todos, más allá de lo que rodea a Desembarcvo del Rey y a Jaime, el resto se va salvando más o menos. Por un lado tenemos Meereen, donde un Tyruon poco habilidoso intenta arreglar (de nuevo) una ciudad en decadencia con política, algo que no todos ven bien; y por otro Vaesh Dothrak, con una Daenerys que es la verdadera protagonista y unos rescatadores que pintan bien poco en el asunto.

Lejos de ser algo original, lo que hace Dany es básicamente repetir el «truco» con el que conquistó a su antiguo Khalasar tras la muerte de Khal Drogo: quemarse y salir vivita y coleando, solo que en esta ocasión no salen dragones con ella, sino que más bien caen todos los Khals habidos y por haber.

La imagen de ella saliendo indemne de la cabaña es espectacular y la actitud de la Madre de Dragones es impecable, sin embargo, tras ver la escena tres veces, me da que los Khal no están a la altura. Un par de llamitas y ya huyen como nenazas. ¿Realmente no se les ocurre otra cosa que hacer? Entiendo que es una cabaña de madera, seca y con muchas telas, por lo que prende rápidamente, pero son unos cuantos allí metidos para echar la puerta abajo.

Pero dejando eso de lado, el resultado es inmejorable: Daenerys se va a hacer, casi con toda probabilidad, con los Khalasar de todos los Khals. La pregunta ahora es ¿marchará hacia Meereen y liberará de nuevo a las grandes ciudades de la Bahía de los Esclavos o se dirigirá ya hacia Poniente? La cosa creo que está bastante clara, ya que la muchacha no va a dejar tirado a su pueblo. A ver qué hacen los dragones en todo este lío.

Pero por supuesto, la otra gran pelea que se avecina ya se ha presentado hoy formalmente: Jon Nieve contra Ramsay Bolton. La declaración de guerra enviada por el bastardo que ahora ocupa el trono de Invernalia lo ha dejado bastante claro y ha surtido más efecto que la reunión (para mi inesperada) de Jon y Sansa.

La mayor de los Stark, lejos de quedarse mudita y apoyar a su medio hermano implorando protección busca venganza contra su marido y recuperar Invernalia para ellos. Parece que a la muchacha le han tocado ya los ovarios y ha decidido ponerse manos a la obra.

Lo que parece ahora más que probable es que Jon va a tomar el papel de Stannis en la serie y va a recorrer rutas norteñas para captar gente para su ejército contra los Bolton en el que será un nuevo asalto a la fortaleza del norte.

Melissandre parece que hará lo que él diga y ya da por supuesto que su príncipe es él y no Stannis, aunque sigue siendo, como Olenna, otra sombra de lo que era. Ha perdido su chispa, aunque en ella lo veo más lógico, ya que su fe anda algo… débil. Y la aparición de Brienne no le deja demasiado tiempo para relajarse, la verdad.

Y hablando de la reina de Roma, hay que admitir que algo de gracia han tenido esas miradas entre Casaca de Matraca y la muchacha. Mucha gracia, aunque no peguen ni con cola y ella esté destinada a hacerle tilín a Jaime. A ver también cómo se desarrolla todo en cuanto a la entrada de Meñique en esta guerra a la que lleva a los súbtidos de El Valle para apoyar a Jon y a Sansa.

Por último, otra cosa que se distancia bastante de los libros es Pyke, donde Theon llega para redimirse de lo que le hizo pasar a su hermana e intentar convertirla en la Reina de las Islas del Hierro. Ninguna pega en este aspecto. Vamos a ver cómo acaba la cosa porque no sé por dónde la van a coger en esta guerra de sucesión.

Como veis, ni Bran (y el pasado de Jon Nieve), ni Arya (menos mal), ni Sam, ni unas cuantas más cosas que vuelven a quedar aparcadas por el momento. Espero con muchas ganas los desenlaces de lo que se está preparando en la serie, pero quizás espero con más ganas que vuelvan las intrigas y las conspiraciones.

Por desgracia, entre que ya no tiene el apoyo total de los libros (solo un mero guión que les habrá dado R.R.Martin) y que la situación va llegando a puntos de desesperación que hacen que solo Meñique destaque un poco en todo este asunto, siendo el que mejor urde en la sombra y el que, misteriosamente, es capaz de predecirlo todo con una gran tasa de acierto.