Empezamos con las formas Alola y, ahora, con Espada y Escudo, llegan otras formas regionales, pero ¿conoces la verdadera historia de las formas Galar?
Estar en redes sociales y querer no enterarte de las últimas noticias de Pokémon Espada y Pokémon Escudo es casi misión imposible. Que si filtraciones de las evoluciones, que si toda la Pokédex… lo que no nos muestra Nintendo, nos lo muestran los propios usuarios. Pero hay algo que no os han mostrado. Ni podrán. Porque la información que os vamos a dar es exclusiva de GuiltyBit. Culpables, aquí tenéis para vuestro regocijo la verdadera historia de las formas Galar de Pokémon Espada y Pokémon Escudo.
El problema del capitalismo: Weezing
El alma humana está corrompida por el vil metal, y eso se deja ver en la región de Galar. La revolución industrial llegó de la noche a la mañana, cimentado bajo el duro esfuerzo de los mineros y la explotación de los pobre Rolycoly. La clase alta no paraba de aumentar más y más fortuna, pero los constantes saboteos a las fábricas hicieron que muchos empresarios tuvieran que buscar una forma de continuar su producción sin perder un sólo pokedólar.
La solución vino de manos de experimentos genéticos en los pobres Weezing, los cuales, ajenos a los planes de los magnates, se prestaban voluntariosos a echar una mano. Así, tras varios años de investigación, consiguieron su propósito: Pokémon que funcionaran como máquinas de vapor portátiles. Funcionaba, claro está, pero la densidad del humo se pegaba a la delicada piel de los Weezing, obligándolos a tener esa sempiterna «barba», acompañada de una cara de desdicha. Lo peor de todo es cuando los ricos empezaron a imitar el aspecto de los Weezing llevando sombreros de copa y frondosas barbas.
Con el tiempo, este turbio asunto se diluyó, y hoy en día todos creen que los Weezing cambiaron su aspecto debido a las maquinarias por selección natural. La moda se sobrepuso a la cruda realidad, ocultándola al vulgo. Mientras, la mano negra de la sociedad ríe desde lo más hondo de sus mansiones, sabiendo cómo ganaron una vez más la batalla.
Nace un rebelde: Zigzagoon
El caso de Zigzagoon es un poco menos turbio que el anterior. Zigzagoon, en sus orígenes, era un Pokémon de tipo normal alegre y despreocupado. El problema llegó, nuevamente, cuando los humanos empezaron a capturarlos, concretamente, las damas de alta cuna. Estas, aunque adoraban la apacible cara de los Zigzagoon y su suave pelaje, no soportaban esos picos tan antiestéticos, por eso buscaban a toda costa que evolucionasen a Linoone, manteniendo así su suavidad y un liso envidiable, dignas de su posición.
Sin embargo, cuando estás entre cóctel y cóctel, es complicado subir de nivel a tu Pokémon, por eso se empezó a contratar a entrenadores expertos. La demanda fue enorme, y se pedían más y más entrenadores para hacer evolucionar a los Zigzagoon. Con tales exigencias, era inevitable que más tarde o más temprano surgieran trabajadores no cualificados que mintieran en su experiencia para ganarse una buena suma de dinero. Es así como los Zigzagoon empezaron a tener sus primeros encuentros con la clase media, y los ritmos musicales que ellos escuchaban.
Entre ellos destacó aquel en el que estáis pensando: KISS. Su música y su estética logró que algo hiciera «click» en el cerebro de los Zigzagoon. Estaban hartos de las normas, de vivir encorsetados entre señoras con sombreros enormes. Querían vivir a su modo, y cambiaron su aspecto en base a ese sueño. Una bonita historia de autosuperación y de búsqueda de uno mismo.
A día de hoy, aún se bromea sobre el intento desesperado de la clase alta por volver a enderezar a sus Pokémon, pero la magia de la música ya había calado hondo en ellos.
Friendship Magic: Ponyta
El caso de los Ponyta es bastante reciente. Se remonta a hace apenas unas décadas, momento en el que My Litte Ponyta: Friendship Magic se puso de moda en Galar. Esto llevó a un boom por los Pokémon caballos, haciendo que todo tipo de merchandising se pusiera a la venta. Todos querían que sus Ponyta se parecieran a los de la famosa serie de televisión.
Cambios estéticos, colorantes artificiales… todo ello llevó a que el ADN de Ponyta se modificase, al más puro estilo Eevee, haciendo que las siguientes generaciones de Ponytas de Galar tuvieran el diseño que se nos muestra ahora. El cambio de tipo, por supuesto, viene dado por este mismo motivo. Es algo simple, sí, pero la realidad a veces es así de sencilla.
La lucha por demostrar tu poder: Sirfetch’d
Sí, sabemos que realmente Sirfetch’d no es una «forma Galar» al uso. Pero la historia de superación que nos contó Masuda nos llegó al corazoncito, y por tanto merece que se conozca. Por todos los Farfetch’ds que cayeron. Porque sí, esta historia empieza con un drama.
Y el drama viene por lo siguiente: los Farfetch’d estaban cercanos a la extinción. ¿El motivo? Pues que la gente se los comía, ni más ni menos. Ya lo dijeron en el capítulo 49 del anime: Farfetch’d era considerado todo un manjar. Años más tarde, esto se intentaría diluir con las diferentes leyes anti maltrato Pokémon y enterrado con las actualizaciones de la Pokédex, pero la realidad de los Farfetch’d no puede olvidarse.
Pero volvamos al momento en el que estos pobres patos eran devorados. Eran momentos duros para estas criaturas, armadas con su pobre puerro como única arma. Sin embargo, cuentan que una vez, un noble caballero tuvo un combate singular con uno de estos Farfetch’d, en el que espada y puerro se cruzaron durante tres días con sus tres noches. Ambos contendientes quedaron muy malheridos, por lo que la cosa quedó en tablas. El caballero, admirado por el valor del ave, decidió tomarlo como su escudero.
Años y años de entrenamiento hicieron que Farfetch’d evolucionara en el Sirfetch’d que todos conocemos ahora. Este primer Pokémon paladín se dedicó a mostrar sus enseñanzas a sus descendientes una vez los caminos del caballero y él se separaron, llevando siempre los nobles ideales de la caballería por bandera. Cabe mencionar que los humanos poco a poco se dieron cuenta de las grandes hazañas de estos Pokémon, por lo que cambiaron su dieta a una rica en otros alimentos, salvando así a los Farfecth’d de su completa extinción.