Aunque la prohibición de que las mujeres pudiesen participar en los torneos de HearhtStone copó la mayor atención, ha habido otro grupo de personas que también ha quedado excluido de toda competición. Se tratan de los jubilados, los cuales llevaban años entrenándose en los bares más próximos a sus hogares, y que han visto truncados sus sueños de poder participar en el juego de cartas de Blizzard.
Pese a que muchos de nosotros hemos podido comprobar por nosotros mismos como muchos de ellos se pasan la mayor parte del día jugando al cinquillo, al tute, o al dominó, no se trata más que de unas variantes que les sirven igualmente para crear sus estrategias para los mazos de Brujo, Chamán o Druida, por poner algunos ejemplos.
Y es que tras esta noticia se han descubierto algunos de los trucos que utilizaban para pasar desapercibidos. Por ejemplo en el cinquillo, el jugador que empieza vendría a ser el que está al lado del que tiene La Moneda. Cuando dicen «arrastro!» se refieren a ataques de control de masas y que sirven para limpiar la mesa. También se ha descubierto que los famosos mirones que se juntan alrededor de la mesa mientras se toman el vermú no son más que señuelos que hacen que uno de ellos, que tiene el papel de árbitro. pueda pasar desapercibido.
Parece que el colectivo de jubilados no tiene intención de rendirse, y aunque de momento pasarán el tiempo con la petanca, que viene a ser un simulador del Starcraft encubierto.
Fuente: TrollBit