Girls 6×05 – Crítica

El 6×05 de Girls muestra el camino a la madurez de sus protagonistas, y en especial de Hannah, que se enfrentará a una de las mayores decisiones de su vida.

El tiempo pasa volando, y ya solo quedan tres míseros episodios para que Girls nos abandone para siempre. Esta temporada está siendo la más madura que hemos visto hasta ahora, y este episodio, «Gummies»,  se lleva la palma. Sobre todo por la parte que le toca a la pobre Hannah.

El camino de Hannah hacia la madurez

Hannah siempre ha sido uno de los personajes que menos han gustado en Girls, y, curiosamente, el más inmaduro. Mientras Marnie tomaba grandes decisiones en su vida, Shoshanna luchaba por su futuro profesional y Jessa…bueno, era Jessa, Hannah iba dando tumbos sin tener claro ningún aspecto de su vida.

Hasta ahora. El personaje interpretado por Lena Dunham se enteró en el anterior episodio de que iba a tener un bebé. Lo primero que se nos pasó por la cabeza a los seguidores de la serie es que ni de coña iba a tenerlo, pero parece que estábamos equivocados. Al menos de momento, Hannah parece estar bastante convencida de que lo va a criar, aunque el mundo esté en su contra. Me ha sorprendido la reacción de Elijah, ya que si bien se puede estar totalmente en contra de tener hijos (no a todo el mundo le gusta y es totalmente respetable), se pasa tres pueblos siendo duro con Hannah y soltando unas verdades que duelen demasiado.

Hannah está demostrando su camino hacia la madurez, tomando decisiones muy importantes que van a dar un giro decisivo a su vida. Por primera vez son las demás las que van dando tumbos, mientras ella ya tiene algunos pilares fundamentales de su vida bien claros. A ver si le sale todo bien, porque además su embarazo sigue siendo un secreto para el resto de su grupo de amigas.

Por otro lado, ver a su madre tan sola ha sido descorazonador. Esta serie es, como siempre, tremendamente realista, y nos muestra lo solitaria que puede ser la vida de una divorciada de 60 años. No todo son risas y tacitas de Mr.Wonderful en el mundo, se puede estar MUY jodido y Girls nos lo demuestra de la forma más directa y realista en cada episodio.

Crisis de parejas

MENOS MAL. Al fin Ray ha abierto los ojos respecto a Marnie, un personaje al que le estoy cogiendo una manía tremenda. Ya llevaba un tiempo siendo un poco egocéntrica, pero el egoismo que está desprendiendo en esta temporada ya es un poco insoportable. Ray no se merece estar con alguien así, y hasta aquí han llegado las cosas. Ojalá esto signifique su vuelta con Shoshanna, que aún están a tiempo antes de que termine la serie…

Jessa y Adam, por su lado, ya no me parecen tan idílicos como en el anterior capítulo. He visto algo muy raro en las escenas de Adam con la actriz, como una intimidad que no veo con Jessa. ¿Estará esta «doble de Hannah» haciendo que reconsidere sus sentimientos hacia la protagonista? La vida da muchas vueltas, y estos tres episodios que quedan pueden ser decisivos para el triangulo Hannah-Adam-Jessa.

Qué difícil es ser adulto

La sensación que deja el quinto episodio de la sexta temporada de Girls es lo complicado que es ser adulto. Así lo expresa Genevieve, la actriz que interpreta a Hannah en la película de Jessa y Adam y que, irónicamente, acaba coincidiendo con la verdadera Hannah: «Los niños son muy fáciles. Lo que es complicado es ser adulto». Para qué vamos a añadir nada más, ¿verdad?

Tengo que terminar la temporada para decidir si es la mejor de todas, ya que la anterior dejó el listón muy alto, pero el nivel está siendo insuperable. Que penita me da pensar en el final… Y por favor, ¡justicia para Shoshanna! ¿Por qué sale tan poco? Como no le hayan dedicado un capítulo entero a ella sola a modo despedida, será para matarlos. Lo comprobaremos la semana que viene…