Como lo debieron ver los directivos de Sony que, tras conocer que Xbox One iba a ser más cara que su PS4, bailaron y chocaron los cinco en plan quinceañero. El caso es que hasta ahora, las ventas han estado respondiendo bien para la 4º PlayStation a pesar de las noticias de fallos de hardware.
Parece que a Scott Rohde, de Playstation America, se le ha escapado que la alegría fue grande una vez se conoció la diferencia de 100$ entre una y otra consola, llegando a bailar y a chocar esos cinco. Preguntado por como se sintió él al conocer esa diferencia, responde:
No voy a mentir. Recuerdo exactamente donde estaba, en una conferencia de prensa. Teníamos el presentimiento de que [Microsoft] iba a salir con un precio de 499$ pero no estábamos seguros, por lo que, demonios, cuando se confirmó estuvimos bailando y chocando las manos. Fue genial. No importaba lo que me preguntaron en sucesivas entrevistas, mi única respuesta para todo era «399$».
Rohde además afirma que no le sorprendió ver a Microsoft quitando Kinect de su consola para abaratar costes.
Creo que, siendo sincero, siempre asumimos que llegaría el momento en que sacarían su consola sin la cámara. Por lo que estábamos esperando este momento y era algo para lo que estábamos preparados.
De momento PS4 aventaja en ventas en 2 millones a Xbox One. La decisión de eliminar Kinect está haciendo que las ventas de la consola aumenten, de momento, en su país de origen. Si esta tendencia llegase a Europa, junto con la llegada de Xbox One a Japón y (sobre todo) China, quizá quite a más de uno las ganas de bailar.
Fuente: VG247.