Sony llega a este E3 aún en una posición inmejorable, pero da la sensación de que es a causa más de los tumbos de la competencia que por méritos propios, y mal harían en no ser conscientes de ello y caer en la relajación, sobre todo teniendo en cuenta que en Microsoft van cogiendo el rumbo de esta nueva generación y puede que más pronto que tarde consigan ir por el buen camino definitivamente. De una forma u otra, ambas consolas han llegado antes de lo que deberían, dejándonos unos primeros meses con algún buen título, buenas sensaciones, pero tibios al fin y al cabo. Este E3 tiene que ser el del despegue definitivo de la nueva generación, y para Sony, el de la consolidación y la apuesta por los juegos por encima de todo.
En las últimas semanas se han filtrado dos listas distintas de títulos y proyectos que Sony tendría pensado presentar en este E3. Para mi, cualquiera de las dos es poco creíble (baste decir esto para llevarme una hostia en los morros en junio): una de ellas, por ser un absoluto espectáculo, la otra, exactamente por lo contrario. En la primera, me cuesta creer que ya de entrada se vaya a anunciar un The Last of Us 2. Naughty Dog ya estará presente con el primer y deseado gameplay de Uncharted 4 y de momento, eso es más que suficiente. Lo que sea que esté llevando a cabo el «equipo B» (qué poca justicia hace esta denominación), es demasiado pronto para presentarlo, lo que no quiere decir que no vaya a haber (que la habrá) una secuela, o precuela, de la historia de Ellie y Joel. Llegará, seguro, pero no aún. Por lo pronto, Nathan Drake sí que estará, y eso garantiza aplausos y vítores del respetable. La first party estrella de Sony se ausentó el año pasado, así que este 2014 toca volver por sus fueros.
Unos que se la juegan son Ready at Dawn y su The Order: 1886. Tras haber trabajado en ports y versiones menores de God of War, por ejemplo, les ha tocado un reto de enjundia con esta nueva IP ambientada en Londres y con toques sobrenaturales. Gráficamente, el juego pinta de auténtico escándalo, la ambientación y sus protagonistas parecen suficientemente carismáticos… pero ¿y jugablemente? Es hora de que nos enseñen que son capaces de crear algo más que unos pasillos por donde pegar tiros, porque… ¿para qué queremos nuevas IP si terminamos jugando a lo mismo de los últimos 5 años? No hay duda de que será un buen juego, pero falta por ver si saben dar ese paso más que convierta a The Order en una nueva franquicia, y a este estudio en un nuevo Dream Team para Sony como lo es Naughty Dog. Si es así, los usuarios de PlayStation 4 tendrán un nuevo motivo de alegría.
Personalmente, apuesto porque Kratos también estará, y en forma de entrega numerada. Que Sony Santa Monica lanzara God of War: Ascension no hace más que «confirmar» mi teoría en estos casos, al igual que lo que ocurrió con Gears of War: Judgment (ambos decepcionantes). Lanzar una entrega no numerada con una nueva generación a las puertas no puede hacer más que sospechar que este estudio ya estaba trabajando en lo que será God of War 4, y que debería ser una vuelta a los orígenes tras el simplemente decente Ascension. En su momento, esta franquicia fue un pelotazo en PlayStation 2, y aunque haya perdido algo de fuelle, es hora de que vuelva al lugar que le pertenece: el ser una de las exclusivas estrella de Sony.
Otra gente a la que hay ganas de ver manejándose en la nueva generación son Media Molecule. Tras demostrar una gran solvencia a la hora de crear una gran comunidad de usuarios en todas las consolas PlayStation con Little Big Planet, el énfasis que se está poniendo en el aspecto social con PlayStation 4 no hace más que dejarles un campo enorme por sembrar con nuevas ideas, y aunque no se trate de un LBP, sería raro ver cómo en MM desaprovechan la oportunidad. Ya el año pasado mostraron algo, pero nada de lo que se puedan sacar demasiadas conclusiones. Además, si hay un estudio que ha sido capaz de sacar el máximo partido a las pecularidades de cada consola, han sido ellos, como demostraron con Tearaway en PS Vita. Sea lo que sea que vayan a presentar, apuesto a que sorprenderán a todo el mundo.
¿Y de Quantic Dream? No veo nada claro que el equipo de David Cage se vaya a lanzar al estrado con algo más que una demo técnica. En la edición de 2013 mostraron esa llamada The Dark Sorcerer, pero veo complicado que pasen de ahí, siendo el lanzamiento de Beyond: Two Souls tan reciente. ¿Sería posible una remasterización del mismo? Parece bastante probable. Puede que estén trabajando en cosas nuevas, pero me parece demasiado pronto para que lo vayan mostrando.
La última first party en discordia es Guerrilla Games, que tras haber cumplido sobradamente en el estreno de PlayStation 4 con Killzone: Shadow Fall, todos los rumores apuntan a que podrían cambiar de tercio y entrar en el terreno del RPG de estilo occidental. Tienen mimbres y herramientas suficientes, pero habrá que ver si un cambio de género tan radical no les pasa factura. Se rumorea también con que el equipo que tan buen trabajo hizo con Killzone Mercenary, Guerrilla Cambridge, también está enfrascado en algo nuevo. ¿Podemos esperar verlo en la feria angelina?
Otros proyectos interesantes que podríamos ver son ese misterioso Project Beast, al cargo del cual estaría From Software en exclusiva para PlayStation 4, y que si se tratara de una posible secuela de Demon´s Souls sería un bombazo en toda regla, lo nuevo de Sony Bend Studios (que también se lucieron con Uncharted Golden Abyss), Sony London o una posible remasterización de Gran Turismo 6 para la nueva generación, nada descabellado teniendo en cuenta que la versión de PlayStation 3 no ha alcanzado el nivel esperado en ventas y exista la opción de rentabilizarlo en PS4.
Y muchos pensarán «¿Y The Last Guardian qué?». Pues es el momento. Si la obra del Team Ico no aparece, habrá que empezar a pensar en una posible y definitiva cancelación, aunque los altos cargos de Sony hayan insistido una y mil veces en que sigue en desarrollo, e incluso Suhei Yoshida haya afirmado haberlo jugado, y no solo eso, sino que está encantado de cómo va pintando. Será él, porque lo que es nosotros, ni lo vemos… ni lo esperamos.
Evidentemente, hay que hablar de PS Vita. La consola está reflotando en ventas, incluso no son pocas las semanas que supera a 3DS en Japón, pero es que el desarrollo de buenos juegos en el país nipón para la portátil está en buen momento. Sin embargo, no parece que las third parties occidentales estén por la labor de crear grandes AAA, con lo que no creo que el camino que veamos a partir de ahora diste mucho del visto: mucho indie y juego japo. ¿Es eso suficiente? Sony insistirá seguramente en darle importancia como complemento de PlayStation 4, pero eso sigue sin ser lo que esperamos.
Hay un último punto, y no por ello menos importante, del que seguramente vayamos a saber algo: Project Morpheus. Microsoft le ha hecho un buen regalo a Sony enterrando casi definitivamente Kinect, o al menos la imagen de Kinect como futuro de los videojuegos, con lo que tienen en bandeja demostrar que ese futuro pasa por la realidad virtual. Oculus Rift ha hecho otro favor, abriendo la veda y dejando encantados a desarrolladores y entusiasmados a jugadores, así que Sony, con más medios e imagen de marca, lo tiene todo a favor para marcar el verdadero punto de partida para ese futuro… o no.
En definitiva, Sony puede completar un gran E3 solo a base de dar a los usuarios lo que quieren, pero como decía al principio, el riesgo de la relajación está ahí. Los primeros compradores de PlayStation 4 están (estamos) hastiados de meses de sequía y tenemos derecho a ilusionarnos con los próximos lanzamientos. Para eso nos hemos dejado 400 euros del ala.