El E3 ya está aquí y como la gran feria que es, todas las compañías van a presentar los grandes títulos para el próximo año. Es la feria más masiva, la más retransmitida, la más seguida; y eso hay que aprovecharlo. Microsoft llega con un objetivo en mente muy claro: recuperar el terreno que ha perdido desde el gran lanzamiento de Xbox One y PS4.
En estos primeros meses de la nueva generación Sony va ganando la partida y los motivos están claros: fallos de comunicación iniciales sobre unas medidas que, mal contadas, resultaban tremendamente impopulares y el menor tiempo de PlayStation3 en el mercado, que resultó en un catálogo más sólido en la recta final. Ha sido la tormenta perfecta para que Microsoft no entrara con toda la fuerza que debiera.
A mi juicio, el principal problema con el que tiene que lidiar Microsoft es con cómo conciben Xbox. Desde el principio han tenido muy claro que One no iba a ser únicamente una consola para juegos sino un dispositivo multimedia. Sin embargo, los juegos son lo único que importa en el E3. Así pues, ¿cómo van a gestionar desde Redmond eso? Pues personalmente apuesto por un evento días antes de la feria de Los Angeles en el que suelten todas las novedades de One como sistema multimedia para dejar los juegos solamente para el E3, tal y como hicieron el año pasado.
Esto parece que queda más respaldado por os anuncios de la venta por separado de Kinect o la de games with Gold y la casi total seguridad de que habrá más anuncios antes de la feria. La parrilla televisiva que están preparando es tremendamente original e interesante, pero eso en el E3 no importa. La gente solo quiere ver juegos.
Respecto a los títulos, a priori parece que vamos a estar más que servidos. Phil Spencer ha dicho en reiteradas ocasiones que el E3 de Microsoft va a ser de los mejores de su historia, que van a llevar multitud de juegos, nuevas IP, etc. Sin duda son frases perfectamente medidas para crear titulares, pero eso no quita que les falte razón.
De los rumores que han ido saliendo los últimos días podemos ver que, por un lado seguirán apostando por sus grandes baluartes: Halo 5: Guardians, Halo 2: Anniversary Edition, Forza Horizon 2 y Fable Legends. Quantum Break y Sunset Overdrive también harán acto de presencia, que son las dos nuevas IP más jugosas que los de Redmond se traen entre manos. En tercer lugar también habrá algo de tiempo dedicado a juegos de Kinect.
Hasta aquí todo bien y nada nuevo, partiendo de este punto ¿qué se rumorea que podría aparecer y que podría suponer un golpe sobre la mesa? Rare tiene que estar presente. Ahora que Double Helix ha sido comprada por Amazon, Rare tiene que volver a coger las riendas de Killer Instinct en Xbox One y ponerle en el sitio en el que merece estar. Además, si reviven a Battletoads y Perfect Dark, como se viene escuchando, le darán bastante color al catálogo de One. Además, si Ubisoft decidiera sacar Beyond Good & Evil 2 como exclusivo para Xbox One, algo que, visto lo visto, no es nada descabellado, también sería un importante golpe de efecto.
Por otro lado tenemos a Epic, que aunque ya no tienen a Gears of War parece que están desarrollando una saga nueva, de nuevo en exclusiva para Xbox One. La marca Xbox no se puede entender sin Epic, así que me parece totalmente lógico que Microsoft haya decidido volver a ponerse en contacto con ellos para exprimir el potencial de la consola.
Y hablando de Gears of War, es también evidente que Black Tusk debe enseñar algo del nuevo Gears. Sin embargo, tras cuatro entregas, las mecánicas están bastante agotadas, por lo que tienen ante sí el reto de coger el concepto de Gears, reformularlo y crear un buen juego sin perder la esencia. Complicado pero posible.
Respecto a nuevas IP, también se escucha que, además de juegos digitales e incluso indies, Lionhead traerá algo totalmente nuevo. Por lo visto será un juego que se sitúe en un mundo postapocalíptico tras una invasión alienígena. Platinum Games también estará en el ajo con un juego parecido a Viewtiful Joe. El tercer estudio en discordia serán los desconocidos Leap Experience Pioneers con un juego inspirado en la saga Mass Effect, que fue uno de los grandes exclusivos de Xbox en su momento.
Y todo esto viene en un clima favorable, con los recientes anuncios de Xbox One sin Kinect y el anuncio de Games With Gold para One. Así pues, creo que Microsoft tiene todas las papeletas para hacer un gran E3 y para salir triunfante, aunque hasta el 9 de junio son todo especulaciones.