Crítica de Dragon Ball Super 96

Llegó el momento, culpables. Dragon Ball Super 96 da el pistoletazo de salida del Torneo de Poder. Se acabaron las presentaciones.

Tras el espectacular episodio de la semana pasada, toca mirar al torneo de poder. Y lo hacemos con un último capítulo de presentaciones. Dragon Ball Super 96 nos muestra a los dioses de la destrucción que quedaban y, de paso, a los guerreros que componen sus universos.

Era evidente que no íbamos a tener un capítulo tan bueno como el de hace unos días. Pero tampoco podemos desmerecer el de hoy. Nos encontramos ante una pequeña pausa antes de que empiece el lío de verdad. Últimas presentaciones, demostraciones de poder e incluso un mini combate entre los tres dioses de la destrucción de los universos más fuertes. Pero todo es un pequeño calentamiento de cara a lo que llega, por fin, la semana que viene.

Cada uno ya tiene su papel sobre el escenario. Pero pese a la tensión que debe de reinar en él, Goku se lo toma como el que se va de campamento de verano. Bueno, Goku y alguno que otro que se pone a saludar a sus «maestros».

Los parias sin familia

Precisamente, en este sentido hay algo que no me ha gustado y que cada vez me gusta menos. Parece que en Dragon Ball el único que tiene familia es Vegeta. Casi todas las veces que se ha hecho referencia a este tema en la serie ha sido por medio del príncipe de los saiyans. Cuando salva a sus hijos y se inmola, cuando se enfrenta a Bills por pegarle a Bulma. E incluso hoy, cuando se van y su último vistazo a es su esposa.

Me parece perfecto esto pero… ¿no hay nadie más con familia? Entiendo que Piccolo o Roshi no tengan esos momentos emotivos. Pero qué pasa con Gohan y con Goku. Ellos también tienen familia. El primero se desvive por Videl y por Pan. Pero es que el segundo es como el que tiene un primo en «Graná». Que ni tiene primo ni tiene «na».

Con la de veces que se han reunido en casa de Bulma para nimiedades, ahora resulta que ni con el mundo a punto de acabarse tenemos a las familias de los participantes reunidas. Vale que no lo saben. Pero aún así… un besito de despedida de Gohan a Videl y Pan no habría estado mal. Y sobre todo de Goku a Chichi… pero teniendo en cuenta el tipo de relación que tienen estos dos no me extraña que no salga. Pero da rabia. Con lo que fue Chichi en su día.

¿Cómo pelearán?

Es evidente que Dragon Ball Super ha conseguido algo que antes no se había logrado. Y es nada más y nada menos que dotar a un «simple» torneo de algo mucho más interesante.

Estamos hartos de ver en Dragon Ball torneos de artes marciales. Y todos, más o menos, seguían un esquema. Sin embargo, este Torneo de Poder rompe con todo y nos planta muchas más cosas. Tanto dentro como fuera de la pista.

He de reconocer que tengo muchísimas ganas de saber cómo se van a defender los guerreros en el escenario. Krilin y los androides me parecen un equipo al que hay que seguir. El pequeño estratega tiene mucho que ofrecer en el torneo. Y aunque no sea el más fuerte, está curtido en mil batallas. De hecho, junto con Goku, el que más. Recordad que él recuperó casi todas las bolas de dragón en Namek yendo solo con Bulma y con un Gohan bastante inútil. A pesar de su desventaja, es alguien al que tenemos mucho cariño. Y espero que le den el tratamiento que se merece.

Gohan y Piccolo también van a dar guerra por su parte, seguro. Sobre todo porque tienen que hacer piña con un equipo roto. Y por mucho que lo busco, aún no encuentro el sentido a ver a Ten Shin Han de por medio. Ya puede liberar un poder oculto de alguna forma porque… sinceramente, no lo veo aún. Roshi es otra cosa. Es también un personaje clásico. Y es maestro del anterior. Así que creo que acabarán formando equipo también.

Freezer y las subtramas del torneo

Sin embargo, como digo, no solamente hay tramas en el torneo. Es evidente que Freezer trama algo. Y parece que quiere asaltar el poder de los dioses de la destrucción. Sigo pensando que busca ocupar el puesto de uno. Quizás el de Bills.

Recordemos que ya mencionó en su momento que su padre le advirtió de dos grandes fuerzas a las que no debía enfrentarse nunca. Una de ellas era Boo. La otra era el propio Bills. Y el cambio en cómo trata al dios de la destrucción, desde luego deja poco lugar a dudas.

La primera vez que lo vio, cuando regresó a la vida, se alarmó mucho. Le tenía respeto. Pero esta segunda vez, le trata hasta con sarcasmo. No quiere un enfrentamiento directo, pero algo quiere de él. Lo que me ha parecido algo «forzado» es la forma en la que unen y alían tanto él como Frost para combatir durante el torneo.

¿Qué ganan exactamente estos dos uniéndose? Si gana uno, el otro desaparece. Freezer debería de tener claro que tiene que ganar el torneo a toda costa. Matar a Goku solo al final, si es lo que quiere. Pero antes tiene que colaborar. Por eso no lo entiendo todavía.

El resto de participantes

Otro elemento que no podía faltar en Dragon Ball Super 96 era la presentación de otros participantes. Si bien es cierto que a muchos ya los habíamos visto, la aparición del universo 11 ha dejado claro quiénes son los enemigos a batir.

El clásico «it’s over 9 000» se repite por enésima vez cuando aparecen Jiren y sus compañeros en la plataforma de combate. Y si quedaban dudas, su pequeña exhibición de rapidez y calma lo dejan todavía más claro. Él será el enemigo más fuerte de todos. No sabemos si el último en luchar, pero sí el más peligroso.

Luego tenemos a las chicas del universo 2 y a los bichos raros de los otros universos. Porque admitidlo. Son todos muy raros. Y eso que han rescatado razas y personajes que no nos esperábamos. Por ejemplo, hemos visto a un Yardrat. De hecho es curioso porque solo se han visto de refilón en la serie. Y están un poco cambiados.

Yo he echado de menos algún tsufur. No por nada, pero ya que sacan guiños de muchas cosas de Dragon Ball, ¿por qué no hacer uno a GT? Baby fue un malo bastante a tener en cuenta. Me gustó bastante, pese a que el anime no le hiciese justicia. Además, es una raza que desapareció por culpa de los saiyans en el universo 7. Podría haber sido una buena forma de sacar mini tramas dentro del torneo.

Aún así, tenemos bichos de lo más variopinto. Pájaros, mariposas, djins de agua, demonios, arpias, robots, saiyans, saltamontes, una especie de «yo soy groot»… No se puede decir que no tengan imaginación.

A ver qué tal van la cosas porque, desde luego, hay mucho que queremos ver. Personalmente me interesa Califa y sus transformaciones. Si en apenas 10 minutos pasó de dominar el nivel uno al dos de super saiyan de forma natural… ¿qué no podrá hacer esta tía? De hecho me llama más la atención que la propia Broly.

También quiero saber qué ha aprendido Hit en este tiempo. Y la chica que se transforma en chica gorda me intriga bastante, sinceramente. Del resto, y quitando a los obvios, habrá que esperar a ver cómo se lucen en el campo de batalla.

Queda mucho por ver, así que ¿cuáles son las apuestas?