Dragon Ball Super empieza su nuevo arco, Universal Survival Ark, con un nuevo opening y un episodio para ponernos en situación, aunque algo lento.
Llegó el día, culpables. Por fin ha dado comienzo el Torneo de los 12 Universos en Dragon Ball Super, y lo ha hecho con todo lo que esperábamos: opening nuevo, parsimonia y buena animación.
Y es que lo más interesante de este episodio ha sido, básicamente, el nuevo opening donde aparece un personaje protagonista con diferencia del que aún no sabemos nada y lo que parece que será algo parecido a una nueva transformación de Goku. O eso esperamos.
En cuanto a personajes, como os digo, predomina uno sobre todos los demás, y es el que tenéis bajo estas líneas y del que no sabemos absolutamente nada. Seguramente será uno de los luchadores del torneo y vendrá a tomar el puesto de Hit como enemigo a batir. Aparece mucho tiempo en el opening y, además, lo hace luchando contra Goku y forzándole a transformarse en Super Saiyan Blue.
Con respecto al resto de personajes luchadores que aparecen, están los que ya vimos hace un par de semanas (la chica de rosa y el hombre lobo), pero también vemos a unos cuantos más conocidos. Cabba y Frost están en primera plana pero curiosamente Hit no aparece por ningún lado.
También veremos, de refilón, a algunos de los que serán los principales luchadores de los diferentes universos, así comos dioses de la destrucción. Incluso algunos que aún no habíamos visto hasta el momento… o al menos un poco más de cerca. Y aunque no salga directamente, desde luego el «dios payaso» sigue siendo el que más misterio y malignidad desprende. Sí, tenía que usar la palabra malignidad.
Por último están los luchadores del Universo 7 que participarán en el torneo, y a los que también se les da un ratito de gloria. Y qué queréis que os diga, me ha encantado que Krilin tenga ese momento importante nada más empezar el opening. Después de todo lo que ha pasado se lo merece.
Pero a pesar de lo que podamos pensar, hay que reconocer que no solamente Goku y Vegeta imponen en las primeras imágenes del capítulo, sino que otros secundarios como A-17 e incluso Mutenroshi son capaces de mostrar una parte de fuerza que parecía perdida. Hay que admitir que nos han metido hype con esto.
Y si esperabais que pasase por alto a Gohan, es que no me conocéis en absoluto, ya que ahora sí que es evidente que el hijo de Goku vuelve a pelear. Le vemos entrenando y desatando nuevamente su poder junto a Piccolo. ¿Será capaz de mostrar algo digno de ver en Dragon Ball Super por fin?
Al menos espero que alcance a los actuales Goku y Vegeta que, ya que estamos, tienen sorpresas guardadas para el futuro. Si no, mirad esta imagen en la que Kakarotto vuelve a tener el aura roja del Super Saiyan God tras pasar por el Super Saiyan Blue.
¿Será una nueva transformación? ¿Será el kaioken x20 junto con el Super Saiyan Blue por fin dominado? Esto sería lo más evidente, ya que solo lo hemos visto una vez y media. Pero no hay aura azul que se combine con él, sino solamente la roja/rosa. Yo apuesto por el Super Saiyan God, la verdadera forma de un dios que consiguió Goku al luchar contra Bills por primera vez.
Pero también ha habido capítulo
Y esto ha sido lo que el opening ha dado de sí, por el momento, culpables. Mucho hype, muchos personajes y mucha acción. Pero junto con él también ha venido un capítulo del que tenemos que hablar. La cosa es que, por suerte o por desgracia, todo lo que sale ya lo habíamos visto. Y lo que no, responde a cualquier otro capítulo de inicio de saga de Dragon Ball Super.
Por desgracia, pese a que ha sido interesante, tengo que admitir que hay un par de cosas que me han decepcionado.
Por un lado tenemos a Trunks y Goten, que tienen ganas de pelear pese a que van a volver a quedar en un tercer o cuarto plano en este Torneo de los 12 Universos. Es curioso que elijan a A-17 y A-18 para pelear en él y no escojan a Trunks y Goten que han demostrado ser más que válidos. ¿Dónde estaban los androides cuando atacó Buu?
Pero dejemos de lado el tema elección de candidatos, que aún no ha empezado oficialmente, y pasemos al a relación entre Goku y Bills. Y es que el dios de la destrucción podría haber tenido un momento de gloria y recuperar parte de su «poder intimidatorio» hoy. Pero en vez de eso, ha perdido aún más.
Hay un momento en el capítulo en el que Bills se enfrenta a Goku y le amenaza de muerte. Pese a ello, Goku le desafía y hace directamente lo opuesto a lo que él le exige. A cambio de ese desafío, el Torneo da comienzo pero Kakarotto no recibe castigo ninguno por parte del dios de la destrucción.
Entiendo que una vez que se han metido en el berenjenal del torneo, Bills le necesita para que sea su luchador número uno. Sin embargo, me parece demasiado temerario, incluso para Goku, desafiar a un dios de la destrucción.
Personalmente creo que habría sido mejor para el universo de Dragon Ball Super que Goku se intimidase por el poder de Bills-sama y que el Torneo comenzase porque así estaba planeado. Esto habría hecho que el dios de la destrucción siguiese teniendo su aura de poder y que Goku se viese inferior a un dios.
De esta forma que lo han hecho, parece que Goku no tiene rival y que puede pasearse por ahí sin problema ninguno. Y no es que me disguste, pero el balance de poder entre los personajes se desdibuja mucho.
Pero es lo que hay y lo que hay es lo que es. El Torneo ha comenzado y las reglas ya están sobre la mesa, aunque no será hasta el próximo capítulo en el que veamos la parte negativa de los enfrentamientos: la destrucción del universo de aquel equipo que pierda. Goku la ha liado bien parda esta vez.
En cuanto al resto del capítulo, nada más que resaltar. Chichi en su normalidad más absoluta, Bulma embarazada y Vegeta cuidándola (qué mono queda), y Zen-chan siendo tan caprichoso como lo era Bills en su momento.
Veremos a ver qué es la que se nos avecina con todo esto y si se cumplen las predicciones que hicimos hace menos de una semana. ¿Las sigues compartiendo, culpable?