Crítica de Dragon Ball Super 112, comienzan los emparejamientos

Se nota que va llegando la recta final del Torneo de Poder. Dragon Ball Super 112 empieza a dejarnos ver quiénes serán los encargados de terminar este combate.

Tras haber derrotado a Hit y quedarse tan pancho meditando, Jiren ha dado paso a la segunda parte del Torneo de Poder. Y mientras él come palomitas cósmicas y mira lo que ocurre a su alrededor, el resto de universos comienzan las batallas finales.

Aún hay muchos guerreros que no hemos visto luchar. Pero algunos de ellos son, por decirlo suavemente, de relleno del malo. Por ejemplo los robots que pelean contra Goku. Sin embargo, parece que las grandes potencias comienzan a mover ficha y a dejarse ver en acción.

Vegeta y Cabba

Hay que admitir que, pese a que estos dos solamente se han visto una vez en la vida, han establecido un vínculo curioso. Y lo que me da más pena de esto es el pobre Trunks. No es que Vegeta no le tenga cariño a su hijo. Pero leñes, que el saiyan del universo 6 le toca la fibra.

Sea como sea, la cosa es que el torneo de poder vuelve a unir a estos dos elementos bajo la misma bandera. Y, para variar, nuevamente le hacen un power up a Cabba echando un poco por tierra casi todo Dragon Ball Z.

¿Os acordáis lo que tuvo que pasar Gohan para poder llegar al nivel 2 de saiyan? Además de entrenar durísimo con su padre en la sala del tiempo y el espacio tuvo que combatir en el torneo de Célula. Y, lo que lo desencadenó todo fue la muerte del pacífico A16 bajo las botas de leopardo verde de su enemigo robótico.

Con todo eso encima, Gohan reaccionó y encontró la fuerza para sobrepasar el nivel de super saiyan y llegar al sedundo.

Cabba ha pasado por algo parecido… pero en mucha menor medida. Sí es cierto que habrá entrenado en su universo mientras llegaba el torneo y tal y Pascual. Pero es que el estrés al que se ha situado en esta situación no ha sido, ni mucho menos, el mismo.

Ha sido una nueva sacada de miembro viril masculino. O lo que es lo mismo, un «por mis santos cojones». Sin técnicas, sin estrategias y sin cabeza. Solamente fuerza bruta y power up por la cara. Menos mal que, al menos, han tenido la decencia de hacer que no sea ni un digno rival para Golden Freezer. Si no, me habría enfadado. Este ya le pegó la paliza padre a un Gohan en primera. Y Cabba ni de lejos llega al nivel de nuestro querido saiyan.

Los deseos de los guerreros

Creo que ha sido hoy la primera vez que hemos visto un indicio de lo que quieren pedir con las Super Dragon Ball los guerreros del Torneo. Al menos dos de ellos.

De Freezer ya nos esperábamos algo parecido. Sin embargo, no termina de dejar claro qué es lo que quiere pedir. Podría ser superar a los dioses en poder. O quizás obtener el poder de Zenos. O eliminar al resto de los dioses. Vete tú a saber. Pero evidentemente, tiene un plan para resucitar y hacer que todos caigan bajo su influencia.

En cuanto al segundo de ellos, es algo de lo que ya esperábamos algo parecido. Dejando de lado que es imposible que haya un empate (que sería otra opción), la única posibilidad de que varios universos consigan sobrevivir al Torneo de Poder es que las Super Dragon Balls los traigan de nuevo a la vida.

Eso es algo que teníamos en mente, sí. Pero hay un problema con ello. Recordemos que Zenos ya quería destruir 8 universos antes del torneo. Esto lo dicen durante el inicio de la saga. Pero si queréis verlo más claramente, el manga lo deja muy pero que muy clarito. Sin tapujos.

Por ello, si el torneo hace que desaparezcan todos los universos menos uno… y uno de ellos vuelve a la vida por un deseo ¿qué pensará Zenos? ¿Le molestará? ¿Se sentirá estafado? ¿Hará desaparecer al que osa desafiar sus deseos?

Vale que el dios del todo es muy majo e inocente y puro. Pero… ese deseo hace que las cosas se puedan poner muy, pero que muy chungas. Quizás no sea la mejor idea traer un universo de vuelta… si Zen-chan lo ha borrado.

Los nuevos combates

Lo último que se va viendo en este capítulo son los emparejamientos. Aún queda torneo para decir que son los finales. Pero por ahí van a ir los tiros.

Toppo aún no se había mostrado hasta ahora y, como bien dice, el segundo del universo 11 tiene un buen rival delante con el segundo del universo 7. Pobre Vegeta. Pero o despierta el Ultra Instinto de las narices o… se va a quedar así. Por cierto, aún me sigo preguntando por qué es Toppo el aspirante a dios de la destrucción y no Jiren.

El otro combate que llega y que se hace súper interesante es el de Goku contra Califa. Y realmente, ahora tiene algo de sentido todo. Es evidente que la chica no tiene ni un poco de posibilidades contra nuestro protagonista. O al menos en plenas condiciones. Ahora que domina el segundo nivel de super saiyan y que Goku está aún un poco k.o., pues es normal que las cosas se equilibren.

Parece evidente lo que va a pasar en el próximo capítulo. Califa llegará al nivel 3 y demostrará, una vez más, que tiene un poder nato bastante bestia. La pregunta es cuándo volveremos a ver a Kale transformada en Brolylda. No la veo todavía luchando contra Goku. Más bien podría ser un arma contra Jiren o incluso contra Toppo y su compañero de orejas excesivamente grandes.

Quién sabe. ¿Cuáles son vuestras apuestas, culpables? ¿Qué saldrá de aquí? Y ¿cuándo veremos luchar en serio a Gohan y Piccolo de nuevo?