Divinity: Original Sin Enhanced Edition – Análisis PlayStation 4

Divinity: Original Sin Enhanced Edition es la versión definitiva de Divinity: Original Sin, juego lanzado en 2014 para compatibles que nos hizo volver a la edad de oro de los juegos de rol occidentales. En esta nueva versión, además de su llegada a PlayStation 4 y Xbox One con un control completamente adaptado a ellas, encontraremos una cantidad enorme de mejoras jugables y técnicas (la mayoría solo notorias si tenéis fresca la versión original), así como en la historia principal. Currazo de los amigos de Larian Studios.

Rol del bueno con sabor añejo

Hace ya más de un año que pudimos disfrutar del RPG Divinity: Original Sin, juego nacido en Kickstarter al que literalmente le llovieron sobresalientes por todas partes. Y es que el título bien lo merecía: nos ofrecía una historia bastante interesante y perfectamente narrada que conseguía sumergirte por completo en el amplio mundo que lo rodea. Su jugabilidad (con su vista aérea), unos gráficos que demostraban que una cámara de ese estilo podía ofrecernos hermosos paisajes perfectamente recreados y un trabajo artístico sublime fueron las claves de este “Pecado Original”, que muchos “puretillas” recibimos con cariño ya que nos recordaba a la edad de oro de los juegos de rol occidentales.

Divinity: Original Sin Enhanced Edition es la versión revisada de este gran título. Incluye tal cantidad de mejoras que podríamos rellenar perfectamente cinco páginas de análisis detallándolos todos, aunque, como ya os he comentado antes, de peso no son tantos, y muchos ni vais a notarlos como no tengáis reciente la versión original . Empezaremos comentando novedades en el apartado técnico, algo imprescindible en una buena revisión.

Gráficamente el juego ha sufrido cambios, pero ni mucho menos un lavado completo. A nivel de texturas, framerate, estabilidad, rendimiento etc. el juego ha ganado enteros. Digamos que “todo se ve mejor”, pero sin sacar musculo, cosa que tampoco pretendía el original, teniendo otras virtudes más importantes. Las versiones de consola se han adaptado a la perfección en este aspecto, y las veremos como si lo jugáramos en un PC en ultra. La épica OST incluye nuevos temas, y Larian Studios se ha pegado el currazo de añadir voces a todos los personajes secundarios; todo un detalle.

En lo que respecta a la jugabilidad, el control al pad de las consolas se ha adaptado a la perfección. Hay que pillarle el truquillo en un principio, pero en el momento que lo tenemos controlado no echaremos de menos para nada el ratón. Ahora tendremos la posibilidad de jugar en cooperativo a pantalla partida y explorar las mazmorras mucho más rápido, pues si ya jugasteis al original sabréis que en este juego no todo son combates y levear, sino que también tenemos puzles y trampas a lo largo del mapeado. Al sistema de combate se le han añadido nuevas habilidades, pero por lo demás se mantiene intacto.

Al mapeado original se le añaden nuevas zonas que explorar, e incluso tendremos un nuevo final disponible para el título, reforzando aún más el mínimo de 40 horas jugables que nos ofrece la obra de Larian Studios. Un largo periplo que, recordemos, no será un camino fácil; aunque tenemos a nuestra disposición varios niveles de dificultad, por si somos de desesperación rápida.

Versión definitiva de un gran juego

Divinity: Original Sin Enhanced Edition no pretende competir técnicamente con ningún juego del género, aspecto que en la actualidad algunos se empeñan en mirar con lupa. Es un gran RPG con una profundidad digna de los mejores del género, y totalmente recomendado tanto para novatos como a los que echamos de menos el rol añejo. Si ya jugaste a la versión original, aunque son muchos los cambios, no acabo de ver nada con un peso tan grande como para repetir partida, ya que a pesar de que el juego en PC ha salido en formato “actualización” de la primera versión, nuestro antiguo save no será válido, obligándonos a empezar desde el principio. Las versiones de consola mantienen el nivelazo de PC incluso en el control, reiterándome de nuevo en el gran trabajo de adaptado realizado en este apartado.

En definitiva, Divinity: Original Sin Enhanced Edition es la versión final de un juegazo. Si sois amantes del RPG tradicional, ni dudéis su compra.