Le tenía echado el ojo a Destiny desde hace tiempo, pero tras escribir el avance que publicamos hace menos de dos meses tengo el hype poco menos que por las nubes. Que Bungie y Activision decidieran, en colaboración con Sony, publicar una alfa justo la semana del E3, no solo me pareció un buen movimiento, sino además una muestra de que están muy seguros de lo que iban a ofrecer a los jugadores, porque no deja de ser algo arriesgado. Y en efecto, tras echar unas cuantas horas a este pequeño adelanto, crear un par de personajes y recorrer solo una mínima parte de lo que será uno de los cuatro planetas (o tres planetas más la Luna) que formarán parte el mapeado completo de Destiny, las primeras impresiones no pueden ser mejores.
Lo primero que nos encontramos al iniciar la Alfa de Destiny son unos menús claros, cómodos, intuitivos y bastante bien adaptados a pad, aunque curiosamente, manejaremos la interfaz off-game a través de un cursor que controlamos con el stick derecho, lo que da ciertas pistas de su posible y futura conversión a PC, que en ningún momento, ni Activision ni Bungie han descartado. Primer miedo quitado, parece que los usuarios de consola no nos perderemos navegando por los menús de un género al que estamos tan poco habituados, y es que aunque tanto editora como desarrolladora hayan negado que Destiny sea un MMO, mantiene toda la estructura del género.
La creación del personaje es muy sencilla, y aunque no tenga la profundidad de los grandes del rol, por ejemplo, si es lo suficientemente completa para que sintamos que nuestro protagonista es diferente del resto, amén de la personalización posterior. Lo primero, evidentemente, es elegir la clase entre las tres disponibles: titán, cazador y hechicero. A partir de ahí elegiremos raza (humano, insomne y exo), y varios tipos de elementos básicos como la cara, marcas en la misma, complementos… Comienzo la aventura con un cazador, que siempre he tenido complejo de francotirador.
De momento, se nos da acceso a solo una quinta o sexta parte del mapeado completo de la Tierra, concretamente una Rusia devastada por la radiación, con elementos futuristas pero todavía con atisbos de lo que fue la antigua civilización, es decir, la nuestra. Veremos un barco varado, un avión estrellado, una buena cantidad de coches en medio de un puente derruído… Da la sensación de que en algún momento, hubo una especie de explosión o acontecimiento repentino que dejó el escenario asolado, más que tratarse de algo gradual y progresivo. A pesar de no tener una extensión demasiado grande, si es lo suficientemente amplio para que, tras ser conscientes de la proporción que ocupa sobre el escenario total, sí podamos concluir que el mapeado completo de Destiny será enorme. Aún así, tengo que dejar claro que tras llevar al máximo nivel permitido a mi primer personaje, no vi todo el entorno disponible.
Gráficamente esta alfa ya luce a buen nivel, sobre todo en entornos exteriores, con ciclo día-noche en tiempo real, en el que los efectos de iluminación y de partículas ya están a una altura excelente. El que haya sido afortunado de contemplar un amanecer y/o un anochecer puede dar fe de ello. Sorprendentemente (al menos a mi me ha pillado un poco de sorpresa), tendremos bastantes escenarios interiores disponibles que explorar, aunque tal vez (y de momento, esto hay que dejarlo claro) con pocos puntos de interés.
Sin embargo, no solo hemos tenido acceso a esta Rusia asolada, sino también a La Torre, el punto de encuentro de los guardianes, y lugar donde pasar largos ratos antes de volver a enfrascarnos de nuevo en la aventura. Seguramente este sea el punto donde los novatos del género se puedan sentir abrumados, y es que las opciones no son precisamente pocas, ya que en en este escenario podremos comprar todo tipo de equipo y desbloquearlo (ya que encontraremos armas y otros objetos random que habrá que descubrir a un no muy elevado coste), aceptar desafíos y misiones, adquirir nuevos vehículos y mejorarlos… Eso sí, bastarán unas horas para familiarizarnos con este sistema.
La progresión del personaje sigue también un proceso bastante asequible para cualquier tipo de jugador, lo que puede echar para atrás a los veteranos del MMO: normalmente (no siempre), cada vez que subamos un nivel adquiriremos una nueva habilidad, activa o pasiva, que en el primer caso habrá que asignar a unos comandos. Y he aquí uno de los puntos débiles de lo mostrado en esta alfa: tras llevar al nivel máximo a mi cazador, comencé con un nuevo personaje, esta vez un titán, y las diferencias entre uno y otro no son excesivamente grandes. De todas formas, no solo hay que tener en cuenta que estamos ante eso, una alfa, sino también que probablemente, transcurridas muchas horas de juego y subidos muchos niveles, esas diferencias se incrementarán.
Una vez dejados de la mano de Dios, la primera misión que se nos encomienda es acabar con una maga, y lo primero que llama la atención es que los enemigos no tardan en aparecer, aunque no sea muy complicado dar cuenta de ellos. Y seguimos con la tónica de hacer todo sencillo (que no simple, ojo): pulsando el panel táctil del Dual Shock 4 veremos nuestro guía, que nos indicará el lugar del próximo objetivo, además de darnos la posibilidad de invocar el primer vehículo que se nos otorga, que por supuesto, no está equipado con armas ni nada parecido, simplemente con la capacidad de turbo. El control de este vehículo es impecable, por cierto.
En cuanto a las armas, la verdad es que la variedad está presente: rifles de asalto, de pulsos, de francotirador, automáticos, semi-automáticos, escopetas, revólveres… con la posibilidad de llevar equipadas dos al mismo tiempo y unas cuantas de reserva. Eso es lo que sabemos, pero lo que no sabemos es el grado de personalización de cada una de ellas y de especialización que tendrá cada clase. Es decir, si a la fuerza un cazador será mejor manejando el rifle de francotirador que un hechicero, por ejemplo. Se supone que debería ser así.
Lo que si es distinto en cada clase es la habilidad que desbloqueamos al principio, siendo en el caso del cazador la invocación de un revólver de fuego que pega unos cañonazos considerables, en el del titán un golpe en el suelo con ambos puños capaz de dañar a todos los enemigos alrededor del radio de acción y en el del hechicero, el lanzamiento de una bola de energía de gran daño también. Como decía antes, es de esperar que conforme se vaya desarrollando nuestro personaje tengamos la posibilidad de aprender habilidades nuevas, así como poder mejorar las que ya tengamos.
El desarrollo de estas primeras horas es el típico de un MMO, con la presencia de dos misiones principales, no demasiado complejas, y otras secundarias más sencillas, del tipo «recoge tal cantidad de X objeto» o «mata a x enemigos», aunque la gracia sobre todo ha estado en poder encontrarse con otros jugadores, improvisar misiones jugando de forma cooperativa y evidentemente, dar con eventos públicos como la aparición de un enemigo mecánico similar a una araña y de un poder tal que es practicamente imposible acabar con él entre solo dos jugadores.
Ese es uno de los puntos fuertes de Destiny. Bungie siempre ha insistido en que jugar de manera individual será igual de divertido que cooperando, y aunque no sea exactamente así (siempre es mejor en compañía), jugar solo resulta igual de satisfactorio. Eso sí, habrá momentos en que los forever alone tendrán que asumir que sin ayuda no irán a ninguna parte en ciertas situaciones, y es que nuestros enemigos, pese a tener en ocasiones comportamientos extraños (esa IA, asignatura pendiente para septiembre) tienen niveles en relación a las zonas en que se encuentran. Cual fue mi sorpresa, estando ya en nivel 8, al adentrarme en una gruta y encontrarme con una horda de colmenas (enemigos similares a unos zombies) y ver que su nivel era «??», tal cual. Evidentemente, los impactos de cualquiera de mis armas no les hacían ni cosquillas… Con lo cual, sí, de momento la IA es algo a mejorar, pero no por ello Destiny será un juego fácil.
La cosa no terminó ahí, y es que además hemos tenido la posibilidad de visitar El Crisol, un mapa multijugador ambientado en este mismo entorno ruso para poder disfrutar del PvP de Destiny, en partidas del típico modo Captura la Bandera entre dos equipos de seis jugadores. A pesar de que este modo competitivo no será el principal aliciente del juego, cumple bastante sobradamente en términos de netcode, con partidas muy equilibradas y frenéticas, ya que los mapas no parece que serán demasiado grandes, tendiendo al estilo que ha implantado la franquicia Call of Duty. Aparte, algunos objetos y misiones que logremos en este modo nos reportarán beneficios en la campaña principal, con lo cual, se demuestra que no está de relleno.
Destiny será el primer juego de nueva generación que disfrutemos en PlayStation 4 y Xbox One, en el sentido que la experiencia no será ni mucho menos cercana en su versión menor, para PlayStation 3 y Xbox 360. Por si eso fuera poco, representar un género al que los usuarios de consola no están ni mucho menos habituados, hará de él algo realmente nuevo para quien nunca haya jugado en compatibles. Solo queda poco menos de dos meses para su lanzamiento, tiempo suficiente para pulir pequeños detalles e insuficiente para estropear todo lo bueno que se ha logrado, que es mucho, ya que el mimo y el gusto por el detalle está presente en cada segundo jugado a esta alfa. Si Bungie y Activision cuidan el producto también tras lanzarlo al mercado, con frecuentes actualizaciones, expansiones, DLC, etc… sin precios abusivos, estaremos ante uno de los grandes de la generación sin ningún tipo de dudas.
Son Goku y Vegeta serán los protagonistas del próximo tráiler de DRAGON BALL: Sparking! ZERO.…
Devil Jin en Tekken 8 es el último personaje de la plantilla inicial en mostrar…
La nueva entrega de Yakuza se llama Like a Dragon: Infinite Wealth. Regresan las locuras…
Bandai Namco publica el tráiler de lanzamiento de Tekken 8, próximo videojuego de la mítica…
Llega el manga Dragon Ball Super 101 en el que tenemos más historia de los…
Disponibles los Wordle del 18 de enero de 2024. Pistas y solución del Wordle 742,…
Esta web usa cookies.