Dark Souls III recibirá una actualización con varios cambios y ajustes antes de su próximo DLC, La Ciudad Anillada.
Bandai Namco ha anunciado que llegará un nuevo parche antes del último DLC de Dark Souls III, La Ciudad Anillada. Estará disponible, concretamente, desde el día 24. Esta actualización está centrada en preparar el juego para la expansión, pero también corregirá varios problemas, añadirá las nuevas arenas y mejorará el frame rate de Playstation 4 Pro.
Entre la larga lista de cosas que se implementarán destaca ese aumento en la tasa de fps de la consola. Eso sí, no se indica exactamente si se trata de una mayor estabilidad o de una mejora considerable. Cualquiera de las dos cosas le sentará genial al juego, que le hace falta, así que no nos vamos a quejar.
Además de eso y de la corrección de varios bugs, el equipo de From Software ha trabajado duro en el equilibrio del juego. Varias armas (y tipos enteros de armas) han sufrido cambios. Por ejemplo, se han modificado las armaduras pesadas para hacerlas más resistentes (y con más peso aún), que es algo que se venía pidiendo desde hace algún tiempo.
Arreglos para el equilibrio en PvP
También ha aumentado el daño que produce el veneno, la hemorragia y los espadones curvos. De hecho, las armas pesadas salen bastante beneficiadas con este parche: varias mejorarán su poder de ataque pero la energía necesaria para golpear se ha reducido. También se verán afectados varios hechizos, especialmente los que son de larga duración.
El equipo se ha trabajado bien esta actualización para hacer que todos los personajes sean más satisfactorios y estén equilibrados. Tras la salida del DLC, el multijugador del título tendrá que estar muy cuidado para alargar su vida. Esperemos que les haya salido bien, que ya hay ganas de ver nuevos trabajos y no tanta actualización.