Estos de King son unos bocas de cuidado y ya no saben donde meterse. Desde que crearon su Candy Crush Saga han estado intentando registrar las palabras ‘saga‘ y la manida ‘candy‘, que acompañan al título. Después de un año ha desistido en su intento en dominar los caramelos.

Así constaba en los documentos de la U.S. Trademark Office, la oficina de patentes norteamericana, que rezaba «el solicitante abandona expresamente la presente solicitud en el registro de la marca». King rellenó la solicitud el 26 de febrero de 2013, que fue aprobada el pasado 15 de enero. De ser aprobada por el fiscal asignado, le permite tener derechos exclusivos sobre dicha marca para prendas, videojuegos y mucho más.
Según sus palabras, estos intentos de registrar dichas palabras como su propia marca no era un intento de interrumpir el futuro de otros desarrolladores, sino de tomar medidas apropiadas para proteger su propia IP, tanto ahora como en el futuro. Obviamente todo eso nos suena a excusa barata, y ya es considerado como uno de los desarrolladores más bocachanclas de los últimos años.
En respuesta a todas estas pantomimas de las marcas, varios desarrolladores se unieron a la petición de Candy Jam, que pidieron a todos los participantes crear un juego con caramelos, que incluyeran palabras como ‘candy‘, ‘scroll‘, ‘memory‘ y ‘saga‘. Vamos, para dar por culo.
Fuente: Polygon