Septiembre es el mes de Destiny, y aquí en Guilty no va a faltar de nada, desde ronda de análisis, tramposillos con munición para dar y regalar, hasta comparativas gráficas por doquier. Los chicos de IGN han abierto la lata con la suya, muy currada, en la que podemos apreciar qué diferencias hay entre la vieja y la nueva generación.
Empezamos por lo obvio: en PS4 y Xbox One se ve mejor. Gráficamente no solo las largas distancias se aprecian más nítidas, sino que además los efectos de luz y las sombras son mayores y más conseguidos. Obviamente, un potencial de hardware mejor logra estas cosas, por lo que tampoco es una crítica a la oldgen.
Como se puede ver en el vídeo, en los inicios del juego llegamos a una zona oscura en su mayoría. Una vez se activa el sistema de iluminado, en la nueva generación todo se percibe más claro, y las distancias sufren menos difuminado, en contra de lo que ocurre en PS3 y Xbox 360 donde dicha difuminación se acerca, llegando a las estructuras cercanas.
En cuanto al gameplay, el modelo de los enemigos durante la batalla se percibe algo más conseguido en Xbox One, aunque no hay mucha diferencia con PS4. Donde se nota es a la hora de fijarnos en la oldgen, donde el aspecto de los enemigos es más rudimentario y no tan visual y preciosista.
En resumen, cualquiera de las cuatro opciones nos pone ante un juego gráficamente espectacular. Como es obvio, en las consolas de nueva generación se verá todo mejor, pero se ha realizado un gran trabajo para que Ps3 y Xbox 360 no se queden muy atrás con respecto a sus nuevas hermanas. De todos modos, esto es una humilde apreciación de este redactor, estamos deseando conocer la tuya culpable.
Fuente: IGN.