Channing Tatum protagonizará Red Shirt, lo nuevo del director de Deadpool 2

Channing Tatum protagonizará Red Shirt, la nueva película de espías del director de Deadpool 2.

David Leitch, el director de Deadpool 2, ya tiene a su nueva estrella en el ojo de mira. Channing Tatum protagonizará Red Shirt, una nueva película de acción y espías. Todavía se desconocen más detalles, pero Simon Kinberg; director, productor y guionista de distintas películas de X-Men, ha comentado que: «Un nuevo giro a lo James Bond con potencial de franquicia»

Con estas declaraciones podría referirse a una especie de Kingsman, donde la figura de James Bond es tomada como referencia, pero llevada a su propio terreno logrando, así, una identidad propia, pero reconocible. O, tal vez, sea una mezcolanza entre el clásico cine de espías sobrio y elegante del agente británico con toques fantásticos relacionados con los poderes de los mutantes. Quién sabe qué saldrá de ahí.

Ser o no ser, ese es Tatum

Lo que actualmente se suele preguntar el público sobre Tatum es: ¿Interpretará o no a Gambito en el UCM? Lo cierto es que esta cuestión lleva sin responderse desde hace tanto tiempo que ya es casi un olvido en Marvel, aunque no para los fans. Se suponía que Channing Tatum protagonizaría la película en solitario de Remy LeBeau (Gambito), pero nunca se supo más.

El proyecto se canceló unos meses antes de comenzar la producción, cuando Disney adquirió 20th Century Fox, lo que, en su momento, dejó al equipo y al reparto descorazonados.

A principios de este año, el guionista Reid Carolin, quien iba a escribirla, comentó:

“Hicimos este mundo en Nueva Orleans que era una ciudad de mutantes que no se preocupaban por salvar el mundo. Iban allí para poder usar sus poderes para salir de fiesta y ligar. Sus manos podían freír la grasa en McDonald’s y cualquier otra cosa imaginable. Lo más difícil para ellos era enamorarse porque podían leer la mente del otro, o cuando se metían en una pelea, podían convertir una mesa en una granada y enviar a su compañero al hospital, como mínimo. Así que todo era una especie de gueto de peleas y desacuerdos mutantes de bajo nivel, y nos sentamos en este mundo de la mafia, casi como una especie de Goodfellas mutante en Nueva Orleans.

«Estábamos justo en la línea de un metro. Habíamos hecho el casting de la película. Habíamos abierto una oficina de producción. Íbamos a rodar en Nueva Orleans.» Dijo el guionista de The Playlist, entristeciéndose por el proyecto que pudo haber sido y nunca llegará a ser (Que se sepa)