Call of Duty: Advanced Warfare – Análisis PS3

El arma de Activision cada año ya está aquí de nuevo. Call of Duty: Advanced Warfare llega a consolas y PC en esta ocasión bajo el desarrollo de Sledgehammer Games, que se unen así a los equipos encargados de la franquicia en un movimiento pensado para darle un año extra de desarrollo a los títulos de Call of Duty, para de esta manera conseguir ganar en calidad sin estar presionados por las entregas.

Después de estar involucrados en el pasable Modern Warfare 3 que culminaba la marca que puso en el punto de mira del mundo los shooter, vuelven para demostrar que todavía se puede innovar en este género, criticado y movedor de masas a partes iguales.

Sin embargo también tenemos que decir que de la versión para anteriores consolas se ha encargado High Moon Studios y de su multijugador Raven Software, por lo que aquí pinta bastante poco la desarrolladora, aunque sí que mantiene parte de responsabilidad ya que el proyecto se ha creado bajo su tutela y a la vez, la propia Activison ha sido la gestora del proyecto. Pero dejando de lado estos detalles, empezaremos a centrarnos en el título en cuestión. Un título que si bien sigue sintiéndose como un Call of Duty de toda la vida, pero que desde muy pronto nos daremos cuenta de que la mecánica y la jugabilidad han cambiado, pero para bien.

No hace falta ser muy avispado para reconocer que esta era el año definitivo para conocer el futuro de Call of Duty, morir o reinventarse. Por ello, estoy convencido de los nervios que se debieron presenciar en las oficias para saber con qué nos podrían sorprender ya. Me imagino que alguien en una reunión se le encendió la bombilla en un momento de lucidez, su garganta se predispuso, y en una pose imitando a Giorgio Tsoukalos dijo:

A partir de aquí, ya hemos visto y jugado al resultado final, un producto que mantiene la espectacularidad características, momentos que nos dejarán la boca abierta, y todo ello sin dejar de lado una gran campaña muy por encima de lo visto en anteriores entregas. El futuro está aquí, y las Corporaciones Militares privadas han dado el paso al frente siendo un nuevo rival o aliado en el mundo. Nosotros, un soldado raso que recién da sus primeros pasos, estaremos metidos en el embrollo.

Desde el primer momento, nos pondremos en la piel de Mitchell (Troy Baker), un recién llegado a la guerra que deberá poner de su parte para que Corea del Norte no tome Seúl. Las cosas no salen lo bien que uno esperaría, y terminamos uniéndonos a las filas de Jonathan Irons (Kevin Spacey) y la corporación Atlas.

Detalles argumentales a un lado, nos encontramos con unas interpretaciones escandalosamente buenas para tratarse de la campaña de un juego que basa todo su éxito a día de hoy en su multijugador. Podrían haber vuelto a recurrir a una historia más de relleno, estirando el chicle de la marca, pero nos hemos encontrado con un modo de juego para un sólo jugador al mismo nivel de calidad que su multijugador.

Esta vez no se ha contado con guionistas de la talla de David S. Goyer o Stephen Gaghan, y ha sido la propia SledgeHammer la que se ha encargado de la historia, dando como resultado un trabajo más redondo en su conjunto, con un hilo conductor que funciona, sin despistar al usuario con saltos temporales, y ofreciendo una experiencia que junto con la espectacularidad clásica de la saga, forman un trabajo muy interesante, que si bien no ganará ningún Oscar, pero que no hará que nos lo pensemos dos veces a la hora de meternos de lleno en el multijugador pasando de largo este modo

Podría tirarme un buen rato hablando de más detalles, pero todo ello se quedaría corto al lado de la mayor novedad de todas: el traje EXO. No sólo nos otorgará ese doble salto tan característico a día de hoy en otros shooter como Borderlands, Titanfall o Destiny, sino que tendremos a nuestra disposición una serie de movimientos, impulsos y fintas, que harán que nuestros rivales tengan que tener una mayor puntería si quieren abatirnos.

Además los enfrentamientos serán mucho más verticales que en anteriores entregas, algo que prima mucho en el multijugador, por lo que tendremos que estar atentos a mirar al cielo, no vaya a ser que alguien aparezca por arriba y nos acribille sin darnos cuenta.

Por este motivo, habrá que pensárselo bien lo de ir andando de un lugar a otro ya además de ser más lento en comparación con el traje, seremos un blanco fácil para todos aquellos jugadores que controlen mejor que nosotros los movimientos extra de este nuevo título. Y no se queda todo en esto.

El traje también nos proporcionará diferentes habilidades, como sprint, mayor vida temporal, poder aguantar más tiempo en el aire, o incluso un escudo con el que defendernos. Teniendo esto en cuenta, ya os podéis hacer claramente una idea de que a partir de ahora, el abanico de posibilidades aumenta considerablemente, y todas vuestras estrategias o ideas que teníais hasta ahora todos los veteranos de Call of Duty, tendrán que verse actualizadas si no queréis ser catalogados como noobs. Porque si no es así, incluso los más novatos pueden amargaros la existencia. Por esta razón, un gran punto a favor de su apartado jugable ha sido la inclusión de un mayor equilibrio entre los nuevos y los curtidos en la franquicia.

Es probable que muchas de estas cosas a más de uno les recuerden a los potenciadores de la saga Halo, y  sin duda no se equivocará, aunque bajo mi punto de vista aquí se ha mejorado esa mecánica. Resulta curioso como una franquicia que no necesitaba fijarse en ninguna otra, ha aprovechado este momento del «ahora o nunca» para hacer un repaso de todo lo que se estaba incluyendo a día de hoy en el género y adaptarlo a su jugabilidad, con un resultado muy satisfactorio.

Todo esto no hace más que hacernos recomendar el título a todos aquellos fans de lo shooters, que por unas cosas u otras habían dejado abandonado CoD cansados de que siempre fuera más de lo mismo.

Nos vamos a saltar por encima el cooperativo, modalidad totalmente de relleno para cuando tengas un amigo en casa o conectado y quieras compartir la experiencia con él, y que apenas aporta nada más que rondas de oleadas, con un guiño ligero guiño al modo Zombie, el cual ha sido arrancado sin escrúpulos del juego. Viendo como en los anteriores juegos ya se hizo lo mismo, esta ocasión ya han rizado el rizo, por lo que los amantes de los DLC (sí, hay gente así) tendrán que comprar esas partes robadas del juego y pagarlas aparte.

Un total de 13 mapas multijugador y 12 modos de juego son todo lo que tenemos en el modo para varios jugadores. Puede parecer suficiente, y realmente lo es, pero la gran variedad de armas, que en esta ocasión es más grande que nunca, hace que todavía tengamos mucho contenido por descubrir.

Manteniendo el estilo de Black Ops, con 13 picks para completar en nuestros diferentes equipamientos, podemos asegurar que en el modo multijugador la variedad está más que asegurada. También podremos personalizar a nuestro personaje de este modo de arriba a abajo, incluso tendremos más de 10 caras a elegir, con incluso la posibilidad de ser un o una soldado. Un montón de armas desbloqueables y versiones mejoradas de las mismas, todo con sus propios extras típicos como mirillas, estabilizadores, granadas, hacen de Advance Warfare como decimos, el CoD con más contenido multijugador visto hasta la fecha.

Con todo lo aquí expuesto a modo de resumen, no podemos más que asegurar que estamos ante el mejor Cal of Duty de todos los que hemos podido probar hasta el día de hoy. Gráficamente estamos ante la nueva generación. Pese a que los pasillos lo benefician, las caras que hemos podido ver rozan la realidad, igual que todo en su conjunto salvo escasos momentos donde se puede er alguna textura menos pulida que otra. Pero técnicamente no hay nada de lo que quejarse, y en la nueva generación tendremos 1080p a 60fps estables.

Advance Warfare es el mayor motivo que hemos encontrado para retomar la franquicia a todos los que la dejaron de lado y un shooter más que decente que hará que paséis interminables horas disparando sin piedad a vuestros enemigos. Bienvenido a la guerra avanzada culpables.

Gráficos: 75

Sonidos: 90

Jugabilidad: 90

Modos de juego: 70

Total: 81