Ojito a la bomba que trae Bloomberg. La entrega anual de la saga de disparos más famosa podría retrasarse: el Call of Duty de 2023 podría llegar en 2024.
Si hay alguien puntual en esta vida es Call of Duty. Hasta Assassin’s Creed, una saga afianzada al carácter anual, decidió tomarse un respiro allá por 2015, cuando cambió el estilo de Syndicate y anteriores por el de Origins y posteriores. No fallaba ningún año, y de repente… Algo así podría pasarle al Call of Duty de 2023, el desarrollado por Treyarch. Tal y como apunta Bloomberg, este no llegaría dicho año, sino que lo haría el siguiente, en 2024.
Así lo ha reportado el periodista Jason Schreier, muy conocido dentro del mundillo por sus precisas afirmaciones. Él mismo ha apuntado a las razones a través de su Twitter personal. No, Microsoft no ha tenido nada que ver con esto. Han sido las bajas ventas de Call of Duty Vanguard las que han animado a Activision a parar un momento, coger aire, reflexionar y tomar la decisión de atrasar el Call of Duty de 2023.
Según Schreier, los ejecutivos de la compañía se mostraron preocupados sobre cómo un título canibaliza al otro, dejándolos apartados en un corto período de tiempo. Eso y que el rendimiento de Vanguard no ha ayudado sobremanera.
La saga lleva sin fallar a su cita anual desde el año 2005. Tal y como apunta Bloomberg, el año que viene Activision ofrecería un videojuego de carácter free-to-play, así como bastante contenido adicional para Warzone 2 y para la entrega planeada para este año (que va a ser un Modern Warfare).
Preguntados acerca de ello, desde Activision no confirman nada… Pero tampoco lo niegan: «Tenemos una amplia cantidad de productos free-to-play y premium para este año, el siguiente y los consecutivos. Otras informaciones son incorrectas. Estaremos encantados de compartir más detalles con vosotros cuando toque».